Maldita sea, finalmente cumplió lo que tanto quería. La idiota de mi hermanastra, Andrea, siempre creyó que era femenino, debo admitir que soy delgado y pequeño pero no soy nada femenino y por supuesto que tampoco soy una chica. Tengo 16 años, me llamo Ángel y soy un chico que fue engañado totalmente pero les contaré como fue que sucedió.
Al pasar al trabajo de mi hermanastra en un maid café, una de sus compañeras se tropezó, tirando encima mío bebidas y comida, arruinando la ropa que llevaba puesta en el proceso.
De inmediato se disculpó y me ayudó a limpiar, mi hermanastra se unió para terminar pronto y llevarme a los vestidores, ahí me pidió mi ropa para limpiarla, cosa que por idiota acepté al no soportar sentirme pegajoso todo el día.
Así ambas chicas me dejaron en el vestidor con una toalla para cubrirme y diciendo que nadie más entraría hasta su aviso, cosa que me dejó un poco más tranquilo.
El tiempo pasó, hasta ver que iban alrededor de dos horas y la tonta de Andrea no venía con mi ropa. En su lugar apareció la misma chica que había cometido el error y por la cual andaba ligero de ropa.
-Al fin ¿Dónde esta Andrea?¿Y mi ropa?-
-Pues...no tengo idea... pidió su descanso para ir a la lavandería, quise acompañarla pero no me dejó y desde entonces no sé de ella...la he llamado y buscado pero no está por ningún lado...-
Me quedé sin palabras, ahora no solo me preocupaba por mi ropa, tenía que saber dónde estaba la tonta de mi hermana que al llamar a su móvil, tampoco respondía.
-Debo ir a buscarla-
-Pero no encontré tu ropa en la lavandería y te meterás en problemas si vas desnudo...¿Qué tal si usas uno de estos?-
Dijo mientras se movía un poco, claramente se refería al vestido de maid, cosa que no me agradó.
-Se que eres un chico pero con algo de maquillaje podrías parecer una chica, así ya no andarías desnudo y podríamos buscar a Andy. Por favor, tengo miedo de que algo malo le pase-
La chica estaba al borde de las lágrimas y tenía razón, no con la ropa si no que algo malo pudo haberle sucedido a la cabeza hueca mientras me ayudaba, tenía que hacer ese pequeño sacrificio para poder ayudarla.
-...Vale, solo no exageres, quiero poder salir sin llamar tanto la atención para buscar a Andrea-
La chica asintió sacando un atuendo de maid idéntico al de ella, ayudándome a poder entrar en él, luego me puso algo de maquillaje y listo, por mucho que odiara admitirlo parecía una chica de pies a cabeza y con unas instrucciones sobre cómo cuidarme por no llevar nada bajo la falda, salí en busca de mi hermana.
Estaba rojo de la vergüenza, notando que mi atuendo llamaba la atención e incluso algunos cumplidos para mí por otros chicos "por lo linda que me veo".
Ignorando eso pase un buen rato buscando sin éxito a mi hermana hasta tener una llamada de ella.
-Hermanito, que linda te ves, de no ser por estar en la casa te estaría abrazando y cuidando-
-Espera ¿Llevas todo el tiempo en la casa?¿Cómo sabes cómo me veo?-
-En realidad me escondí un rato y te tome varias fotos como maid cuando estabas descuidado, aún así llegue a la casa hace una media hora-
-Eres una maldita...-
-Oye, no me digas así, solo quería ver lo lindo que te podías ver cómo una maid y vaya que valió la pena, pero de cualquier forma estoy bien, gracias por preocuparte por mi, así que te recomiendo venir a la casa pronto, ya sabes una linda chica vestida de sirvienta podría ser el centro de atención al anochecer jijiji-
Con esa broma de mal gusto me colgó, haciéndome ver cuan engañado estaba y que llegando a casa me las pagaría pero para llegar a ella, tenía que volver atravesar la ciudad vestido de chica, aunque ya llevo buen rato así, puede que nadie lo note de nuevo así que me moveré tan rápido como pueda para darle fin a todo esto.
Créditos a quien correspondan. |
Me encantó
ResponderBorrarAunque ya ha sido bastante tarde para responder, me alegra que le haya gustado, Nick13Hollow.
Borrar-Nero.