lunes, 22 de abril de 2024

La sesión de Azul

-Okey, con este moño y la gargantilla bien puesta, ya está completo el vestuario de azul. Todavía me sorprende que ella tenga un atuendo como estos pero me alegra poder usarlo, supongo-
Mi mejor amiga, llamada azul, estaba en una situación realmente complicada, ya que tenía que  entregar una sesión de fotos a la brevedad, y al mismo tiempo tenía que estar en un evento familiar.
Que yo sepa no existe la magia capaz de duplicar a mi mejor amiga para que ella pueda estar en ambos lugares al mismo tiempo, lo que sí que existen son pastillas transformadoras que vuelvan a una persona, temporalmente idéntica a otra.
Azul me pidió ayuda con esto, pues como su mejor amigo y a quien más confianza le tenía; ella me pidió que me pusiera su atuendo de conejita y tomará unas fotos con su cámara mientras posaba de forma seductora después de tomar un par de esas pastillas; si yo le ayudaba con este enorme favor, ella podría ir a su evento familiar sin problemas; además que prometió dejarme el dinero de la sesión de fotos completamente  para mí.
Entonces aquí estoy, en la habitación de mi mejor amiga, en un cuerpo idéntico al de ella y usando su traje de conejita, accesorios y hasta una peluca para su sesión de fotos. 
Me sorprende haber podido ponerme todo a la primera, incluso pude maquillarme y cerrar el traje sin problemas, algo que imagino es un efecto secundario de la medicina que me dio para cambiar mi cuerpo por uno parecido al suyo. No sé si sea una especie de sentido femenino para usar estas cosas o compartir sus experiencias, sin embargo eso es algo en lo cual no quiero entretenerme mucho tiempo.
-Ahora que lo pienso, ¿Cómo es que ella tiene estos medicamentos y por qué? Supongo que cuando regrese le puedo preguntar-
Me decía a mi mismo para calmar mi curiosidad frente al espejo.
Peinaba mi peluca rubia con recelo, asegurándome que las orejas de conejita estuvieran en el lugar correcto, el maquillaje pálido también se veía hermoso y contrastaba con sus grandes ojos azules y su labial rojo llamativo. Todo en mi rostro era precioso y preciso, pero todavía quería echar un último vistazo al resto del atuendo.
Los guantes blancos estaban bien puestos, las pantimedias negras eran sorpresivamente cómodas, el traje azul de conejita no intentaba ocultar ninguna de las grandes características de mi mejor amiga, de hecho las correas transparentes de su traje solo ayudaban a resaltar el gran busto de Azul.
Solo para estar seguros, me miré de pies a cabeza una vez más, asintiendo con una pequeña sonrisa una vez que me sentí listo para dar inicio a la sesión.
Créditos a quien correspondan.
-Veamos, cual es la primera pose...¿De cuclillas y con las manos así? Supongo que lo puedo hacer pero no veo porque imitar orejas con las manos cuando ya tengo orejas como parte de mi atuendo. Como sea, esto parece lo más complicado así que lo haré primero-
Azul me preparó un escenario y unas cámaras para tomar las fotos siguiendo la lista de poses que ella escribió para mi, hasta me dejó imágenes de referencia para hacerlo correctamente, Azul en serio se esforzó en que todo lo que yo tenga que hacer, es verme linda frente a la cámara, algo que sinceramente nunca pensé tener que hacer y que es mas complicado de lo que parece, en especial con esta posición. 
-Me sorprende la fuerza de sus piernas, y de mis piernas, ¿Cómo Azul puede aguantar estar en tacones tan altos de esta forma? Ni siquiera se tambalea-
Las piernas hacían presión al estar en esa posición y las pantimedias negras que vestía, al igual que la parte inferior del traje de conejita se sentían más apretados que antes, era algo raro sin duda, a la par que sorprendentemente agradable. Algo desconocido y emocionante.
Me tomó varios intentos posar de forma correcta, ya que a veces llegaba a temblar por descuidos, no sonreía o cerraba los ojos, y cada vez que fallaba significaba volver a aquella posición para intentarlo de nuevo, algo que conseguí tras varios intentos.
-Listo, vayamos con las siguientes tomas-
Con una amplia sonrisa al ver los buenos resultados, estire un poco las piernas y me prepare para hacer lo que seguía de la sesión. Se trataban de muchas tomas sencillas, tan sencillas que casi siempre me quedaban bien a la primera y me hicieron ganar confianza hasta que me sorprendí por lo siguiente que tenía que hacer. 
-¿Es en serio?-
Revisé las notas de mi amiga y vi varias veces las fotos de referencia, no había espacio a duda de que eso es lo que quería. No era ninguna foto explícita o sugerente, al menos no de la forma convencional. Sin duda está parte de la sesión de fotos sería la más peculiar, intentando dar lo mejor para que las fotos cumplan con lo que espera el cliente y Azul.
Créditos a quien correspondan.
-Tengo que hablar con ella. No puedo juzgar su trabajo, ella lo disfruta y hasta me ha comprado cosas con el dinero que gana... solo que saber algunas poses que ella hace para ese dinero, no puedo negar que estoy sorprendido. Cada persona es un mundo-
Cuando pensaba en eso mientras hacía las nuevas poses frente a la cámara por primera vez sentí algo de vergüenza; no era una pose tan reveladora como otras que ya hice y usar esta ropa tampoco fue la gran cosa, sin embargo está nueva pose con un ángulo que enfocaba cierta parte de mi cuerpo, sí logró hacerme sonrojar. Intenté disimularlo varias veces, pero tuve que repetir las fotos varias veces hasta que mi expresión fuera mucho mejor.
Estaba posando hacia mí perfil izquierdo, con mi mano derecha por detrás de la cabeza y mi mano izquierda en lo alto saliendo del enfoque de la cámara, algo completamente intencional para destacar aún más, según las instrucciones de Azul.
Por la parte más baja del encuadre podría verse su trasero y la adorable cola blanca del traje azul de conejita; con esta posición destacaba la esbelta figura de mi amiga, subiendo para presumir sus pechos sin ninguna obstrucción por las tiras invisibles del traje, este ángulo hacía destacar otras partes preciosas del cuerpo de Azul; pero por imposible que pueda parecer, sus pechos no eran el punto fuerte desde este ángulo durante está parte de la sesión.
Sin lugar a duda sus pechos destacaban, incluso yo me dio cuenta que se ven mucho más grandes de lo que ya son, pero lo que más destaca de esta fotografía es su limpia y pura piel de la axila. 
-No puedo negar que es linda, supongo. No es mi estilo, así que intentaré que esto terminé pronto y no hablaré mucho del tema-
Me decía a mi mismo tratando de tomar una buena foto, la cual tras algunos intentos más al fin había conseguido, acercándome un poco más al final de este peculiar que estoy haciendo por Azul
-Sé que me veo idéntico a ella, espero que las personas que quieran sus fotos no sé den cuenta del cambio, me estoy esforzando por dar la talla y pasar inadvertida como si fuera mi amiga-
Créditos a quien correspondan.
-Bueno, al menos ya voy a terminar y esta es sencilla. No pensé que tomarme fotos podría ser agotador-
Casi al final de la sesión me puse a pensar en todo lo que había estado haciendo las últimas horas, descubriendo cosas de mi mejor amiga que nunca había imaginado, dejándome una extraña satisfacción por haberla ayudado y vivir este momento en sus zapatos, o tacones mejor dicho. Supongo que me alegra que sea feliz a su manera y que pueda apoyarla en lo que le gusta, ¿será que habrá una próxima vez?
-Sí, sin duda es espectacular-
Me decías tras sonreír y ver las últimas fotos que tenía tomar, lo cual solo hizo que mi sonrisa y mi alegría crecieran un poquito más, ya que las últimas poses parecían ser las mejores, al menos para mi.
Era una idea final sencilla pero muy linda, adorable al igual que atrevida, mostrando un lado inocente y un poco perverso por igual, algo que de solo ver en las referencias, ya tenía ganas de ver el resultado con Azul. 
Era un ángulo similar al anterior, enfocando más uno de mis perfiles pero esta vez mis manos las unía cerca de mi barbilla mientras sonreía, mostrando con orgullo todos los puntos fuerte que tenía mi amiga, dejándome extrañamente contento y satisfecho por igual frente a la cámara.
-Me pregunto si Azul me regalaría una de estás fotos como recuerdo.... yo podría enviarla a mi teléfono o algo así... no, lo mejor será pedirle la foto, no creo que me niegue una de mis propias fotos-
Me decía al revisar que las últimas fotos habían quedado a la perfección, dando por concluida está sesión y empezando a mandar todas las fotografías a mi amiga para que ella de el visto bueno y comparta el contenido con su cliente. 
-Espero no tenga contratiempos o algún fallo, no molestaría tomarme más fotos. No sé si el cliente opine lo mismo-
Puede que estar a solas contra la cámara fuera más agotador de lo que imaginé, sin embargo estaba contento por esta experiencia en un cuerpo como el de Azul.
¿Lo volvería a hacer? Sin lugar a duda por ayudar a mi amiga, de quien conocí un nuevo lado, sintiéndome feliz de haberlo conocido, admirando esta bella foto de recuerdo, del día en que hice una sesión de fotos como Azul.
Créditos a quien correspondan.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario