Mi hermana y su amiga

Cuando mi hermana sugirió irme de vacaciones a la playa con ella, pero yo usando el cuerpo de su amiga, me pareció la idea más estúpida que había escuchado en años.

¿Cómo podría ser posible que algo así funcione? ¿Y cómo por qué debía tener el cuerpo de su amiga? Sin pensarlo mucho, rechace la pésima oferta sin sentido que me había dado mi hermana, cosa que ella no se tomó muy bien. Dándome cuenta, demasiado tarde.

Al despertarme esta mañana lo hice en el cuerpo de su amiga, vistiendo un bikini azul que resaltaba todas sus cualidades y que era terriblemente vergonzoso de vestir, ya que el traje apretaba todas las partes femeninas de este cuerpo, mismo cuerpo en el cual no estaba muy feliz de estar.

Frente a mí estaba mi hermana desnuda, recién poniéndose un traje de baño aún más provocador que el que yo estaba utilizando, que al darse cuenta que me desperté, sonrió para

terminar de vestirse mientras me explicaba la situación, o mejor dicho, que es lo que iba a suceder a partir de ahora.

Ella se burló diciendo que no era la villana de una mala película y que no iba explicar porqué hacía lo que hacía, solo me dijo que terminaría disfrutando de todo y que le rogaría por quedarme con el cuerpo de su amiga por el resto de mi vida.

Cosa en la que tristemente ella tenía razón. 

Sin explicaciones ni forma de volver a mi cuerpo, no tuve de otra que ponerme una chaqueta y una gorra para salir a la playa, sitio donde un grupo de chicos morenos nos abordaron apenas llegar. Intenté pedir ayuda y rechazarlos pero me fue imposible, no sólo no podía controlar del todo este cuerpo, tampoco podía hablar libremente, ya que mi voluntad estaba dependiendo de lo que mi hermana me ordenará. 

Su orden fue clara, divertirme y satisfacer por completo cada deseo de estos tipos mientras ella se bronceaba. 

Así fue como mi cuerpo obedeció y caminó seductoramente con los chicos hasta un sitio alejado de las personas donde comenzamos a hacerlo, no tenía ni un par de horas en este cuerpo y ya estaba satisfaciendo a varios tipos a la vez; utilizando mi boca para uno, la mano para otro y mi vagina para un último, todo al mismo tiempo y bajo el riesgo de ser descubiertos en este sitio por alguna persona curiosa que se alejara de los demás turistas. 

No entiendo porque mi hermana me hizo esto, ni en qué le beneficia ni nada, solo sé que no puedo detenerme. 

De lo único que puedo estar seguro es que mi hermana está logrando el objetivo indicado por sus palabras, y sin importar que en realidad yo soy un chico sin experiencia sexual, ahora estoy disfrutando como nunca de poder estar en este delicioso y maduro cuerpo, disfrutando de los placeres que una mujer siente a través de esos 3 hombres a quienes por mucho que trate de satisfacer, no parece acabarse su energía. 

Llevo poco más de una hora rotando y cambiando de posición con los 3 sin lograr que ninguno termine ni una sola vez mientras que yo ya he perdido la cuenta de cuantas veces me he corrido con este cuerpo adicto al placer.

Puede ser que mi hermana tenga razón y no quiera volver a mi cuerpo, el cuerpo de su amiga es maravillosa, quiero quedarme así para siempre y descubrir los límites que tiene al pasar mis bellas vacaciones con este cuerpo, rodeada de fantásticos hombres que me hacen sentir mujer. 

Sin duda, este viaje en muy poco tiempo está logrando volverse el mejor de toda mi vida y no puedo ni imaginar todo lo que me falta por vivir como una chica.

Créditos en la imagen.