Carta 2:
La carta tiene una fragancia agradable, difícil de explicar pero imposible de ignorar, con estampillas de nubes y olas además de una escritura bastante curva pero linda.
Buena tarde, mi querido pretendiente.
Me llamo Noelle, soy una mujer de 44 años de edad que desde muy joven comencé a trabajar como maestra de inglés, y por ello, pude jubilarme hace un par de años de mi trabajo.
Sin embargo, podría decir que jubilarme fue una mala decisión ahora que lo veo en retrospectiva.
En cuanto deje de trabajar en la escuela, y deje de cuidar a mis queridos alumnos, me volví bastante perezosa y despreocupada, quizás demasiado.
Pensé en buscar un pasatiempo pero nada me gustaba lo suficiente como para seguirlo intentando, y volver a mi trabajo no era la mejor opción.
Así fueron pasando las semanas, donde solo me quedaba en casa y comía cosas sabrosas, demasiadas ahora que lo pienso.
Antes de darme cuenta, da vergüenza confesarlo pero subí poco más de 30 kilos, pasando de 55 kg a 89 kg en el pasar de años que deje de trabajar.
Lamento no poder ofrecer un cuerpo de supermodelo, o al menos mi cuerpo de hace un par de años cuando era delgada, pero en el amor todo se vale y alguien podría encontrar mi regordete cuerpo atractivo, ¿Verdad?
Me gustaría un cuerpo un poco más joven, quizás volver a trabajar me haga sentir mejor, o simplemente cambiar de cuerpo y de rumbo me siente bien, solo quiero experimentar cosas nuevas en un cuerpo distinto al mío, ya sea temporal o permanentemente.
Por supuesto que estos son mis deseos, pero soy consciente que aquel que lea mi carta puede tener sus propios deseos e intereses, los cuales intentaré cumplir lo mejor posible si aceptas mis sentimientos escritos en está carta.
Estaré ansiosa de conocer tu respuesta, mi querido pretendiente, y espero que mi tamaño no sea un problema.
Créditos en la imagen. |
Carta 5:
La carta tiene algo de polvo y el sobre esta quemado, en lugar de tener estampillas, tiene un grabado de una marca de hierro.
Howdy, guapo.
El nombre es Marie McName.
La edad no se le pregunta a una dama, pero puedo decir que soy Estado Unidense, de Texas para ser exacta.
Toda mi vida la he dedicado a seguir las tradiciones de mi familia; me levanto antes de que canten los gallos, cuido desde las gallinas y sus huevos, hasta de los animales grandes como caballos, vacas y toros, también tengo un pequeño cultivo qué trabajo desde niña y que cada vez da mejores resultados, la vida como granjera es buena, tranquila y alegre.
Por desgracia, ya me estoy aburriendo de esas cosas.
No me malentiendas, camarada. No es que haya algo malo, de hecho estoy bastante segura en decir que la granja esta viviendo su mejor momento.
Sin embargo, no puedo evitar sentirme en la monotonía desde hace mucho años, todos los días es la misma rutina, ¡las mismas cosas sin descanso!
No te equivocas al llamarme pueblerina, donde vivo todavía parece el viejo oeste pero aburrido; todos conocen a todos, nunca hay problemas o novedades, la delincuencia es casi nula, al igual que las cosas de la ciudad; rara vez veo caras nuevas, no hay citadinos o turistas que vengan a estos lugares sin ningún tipo de atractivo, tampoco hay bares o lugares de alta tecnología; no digo que vivamos en la prehistoria, pero sin dudar el pueblo se ha quedado bastantes años atrás desde que tengo memoria.
Ahora que lo pienso, escribir una carta no es nuevo para mí, aunque tenemos teléfonos celulares, la mayoría de las personas son perros viejos que no aprenden trucos nuevos, y estoy cansándome de tener que vivir de esa manera.
Tengo ganas de conocer el mundo, o cuando menos las grandes ciudades, todas esas cosas grandiosas que solo he podido ver en mi vieja televisión, me gustaría conocerlas o hacerlas.
Dime, guapo, ¿Tú eres un citadino o de algún sitio interesante? Me gustaría conocerlo de ser posible.
No me gustaría tomarte el pelo, siendo sincera hay poca cosa que hacer más allá de trabajar, y personalmente no hay hombres guapos o mujeres atrevidas con quienes disfrutar el rato, si te quedas con mi cuerpo tendrás que consolarte a ti misma con las cosas que he comprado a lo largo de los años.
Con eso dicho, estoy dispuesta a cambiar de cuerpo por días o semanas, pero dejarte mi cuerpo para siempre es algo que dudo tengas el valor de soportar, solo el tiempo dirá si estoy equivocada o me das la razón en que mi estilo de vida puede ser muy aburrido, en especial si vienes de la ciudad.
Como sea, creo que he dicho todo lo que pienso, así que te toca a ti decirme que piensas sobre mis deseos y sentimientos, los cuales son tan ardientes como para darte un poco de "atención especial" con la imagen que agregué a mi carta.
Cuídala mucho, me divertí al salir de mi granja para tomarme la foto sin ser descubierta, soy linda, ¿A que sí?
Está vaquera tiene mucho más que ofrecer, camarada, siempre y cuando seas capaz de hacerte cargo.
La carta es genérica siendo amables, blanca y en perfecto estado, cuyo único distintivo es una estampa de fajos de billetes, incluso la letra y su contenido es bastante normal.
Es un placer conocerte, amo.
Mi nombre es Aura.
Tengo 17 años, estoy terminando la preparatoria durante las mañanas, y por las tardes trabajo en un maid café cerca de mi departamento. Vivo sola, y ya que me la paso estudiando o trabajando todo el día y toda la noche, no tengo muchos amigos o algún romance, lo más parecido a un amorío, serias tú, amo.
Lamento muchísimo si mi carta no es tan interesante o de lo más romántica, pero quiero ser lo más honesta posible, esa es la clase de amor que te puedo ofrecer.
Quiero una nueva vida.
Me niego a seguir trabajando turnos dobles hasta en fines de semana; tampoco quiero seguir estudiando, ya que no me importa ir a la universidad o no; y a pesar de que me gustaría tener una pareja o al menos amigos con quienes hablar, no tengo tiempo en esta vida para hacer algo que me guste.
Estoy cansada de vivir de esta manera.
Nunca tuve el valor necesario para hacer un cambio. Al menos, no hasta ahora.
Creo que soy una chica un poco linda, intento verme bien cuando voy a trabajar, pero lamentablemente no sé que más puedo ofrecer. Todo lo que tenga, con gusto te lo entregaré, amo.
Si quieres mi vida, adelante, amo. Te la puedo entregar.
Lo único que pido a cambio, es tener un cuerpo donde pueda sentirme libre y de preferencia, con muchos fondos económicos posibles para disfrutar de mi futura vida.
Una vez más, lamento la falta de calidez en mis palabras, y que más que ser una carta de amor, parezca una solicitud oficial o algo por el estilo. Sin embargo, ser honesta con lo que quiero es el amor más puro que puedo mostrar, y si estas interesado, será un honor qué correspondas a mis sentimientos.
Estaré ansiosa de conocer su respuesta, mi amo y amor.
Le dejaré una foto mía que pude tomar durante el trabajo, para que usted reflexione sobre su decisión.
Créditos a quien correspondan. |
Me gusta la tercera carta
ResponderBorrarNada como absoluta honestidad al confesar que quiere y como se siente, no todas las personas son capaces de ello. Y si con eso, ha cautivado su corazón, le deseo lo mejor, anónimo.
Borrar-Dia.