Corría más que desesperada a mi habitación, el vestido de bodas ajustado no ayudaba y los tacones tampoco, pero ignore todo eso cuanto pude para encerrarme en la habitación, agachando la mirada y así descubrir cómo mi entrepierna se había vuelto a convertir en la de un hombre tal como se supone debe ser.
Desde hace años, casi 10 años me he hecho pasar por una mujer, esto con la ayuda de cierta pastilla que me cambia de sexo, volviéndome así una mujer. Los efectos de la pastilla solamente son temporales, por lo que una vez a la semana debo volver a tomarla para mantener mi aspecto y vida de mujer.
Siendo una chica llamada Carolina es que he hecho mi vida todo este tiempo, tengo amigos, un buen trabajo y por supuesto que un maravilloso novio que hace poco pidió mi mano en matrimonio, a lo que acepté encantada.
Pero este mismo matrimonio es el que me ha puesto en tan complicada situación, ya que al estar preocupada porque la boda salga de forma perfecta y memorable, olvide por completo las fechas de mi calendario y justo hoy, en mi gran día, es que me di cuenta que los efectos del medicamento están a punto de terminar.
Estaba en los pasillos del salón de fiestas, caminando a solas mientras usaba mi hermoso vestido, cuando algo comenzaba a crecer y ponerse duro en mi entrepierna. Después de tanto tiempo había olvidado por completo esta sensación, la de estar excitado y tener una erección como un hombre, recordando está humillante experiencia dentro de mi precioso vestido.
Así fue como corrí tanto como pude hasta llegar a la habitación que se nos había prestado en el salón de fiestas, dándome cuenta en privado lo mucho que sobresalía mi pene del ajustado vestido, destacaba tanto como lo podía hacer mi busto o mi trasero con la diferencia de que en un vestido de novia no debería verse la erección de un hombre.
Todavía tengo un poco de tiempo pero no tengo ni idea de que hacer, la boda en la iglesia comienza dentro de poco y luego tengo que dar la bienvenida a todos los invitados, resolver este asunto es de vital importancia para mi matrimonio, de lo contrario no solo pasaré la mayor vergüenza de mi vida, también puedo perder amigos y al amor de mi vida. Toda mi vida mejor dicho.
Puede que la única solución sea salir a escondidas de mi novio para correr hasta la casa y tomar mis pastillas, sin embargo debo hacerlo muy rápido y con cuidado, de lo contrario puede que alguien descubra mi secreto que he escondido por 10 años o peor todavía, que nadie descubra mi secreto del matrimonio, pero en su lugar piensen que estoy dejando a mi novio en el altar, algo que nos destrozaría a ambos de ser el caso.
Solo estoy perdiendo el tiempo encerrada en la habitación, y entre mas tiempo pierda menos tendré para solucionar esto, al igual que entre más tiempo pierda, más me transformare en hombre como se supone que en realidad soy.
Esta decidido, debo actuar rápido para que así nadie me descubra ni piensen que la novia se ha dado a la fuga, este pequeño inconveniente no arruinara la noche de mis sueños, solo es un pequeño contratiempo para cumplir mi sueño.
Créditos a quien correspondan. |
Muy bueno
ResponderBorrarGracias por comentar, anónimo. Me alegra que le guste está historia, y lamento la demora al responder.
Borrar-Nero.