La novia de su mejor amigo

-¿Funcionó?, ¿En serio funcionó?, ¡Esto es perfecto! Ahora tengo el cuerpo de esta bruja, ¿Quién se cree que es? No por tener una cara bonita y un buen par de tetas logrará alejarme de mi mejor amigo-

    Se decía con orgullo y satisfacción Carlos, al darse cuenta que ahora estaba dentro del cuerpo de Linzy, la novia de su mejor amigo y la responsable de que ambos chicos se distanciaran.

-Fue algo riesgoso utilizar ese hechizo, pero ya que lo hice y funcionó, no pienso perder la oportunidad de estar con mi mejor amigo-

    Carlos y Dany eran los mejores amigos, su amistad había durado años, eran como hermanos y parecía que nada en el mundo podría separar a esta dupla. Sin embargo, alguien sí que fue capaz de separar a los mejores amigos, y respondía al nombre de Linzy.

    Linzy era una hermosa chica de cabello rojizo, pechos grandes y que había enamorado completamente a Dany con muchos de sus destacables encantos. Dany se había enamorado, llenando de mimos y atenciones a la chica hasta que aceptó salir con él, para posteriormente comenzar una relación digna de los cuentos de hadas, salvo por una situación.

    Mientras Dany estaba tan preocupado por tener siempre contenta a su novia Linzy, su mejor amigo Carlos fue hecho de lado. Al principio Carlos no se quiso preocupar o molestar, pero cada vez Dany pasaba menos tiempo con él y pasaba más tiempo con Linzy, lo cual desencadenó una enorme discusión entre los mejores amigos donde había dos posibilidades pero una sola elección: elegir a Carlos por encima de Linzy o elegir a Linzy por encima de Carlos; lastimosamente para el chico, su mejor amigo lo abandonó por un amor, eligiendo a su nueva novia por encima del mejor amigo que había tenido en toda su vida.

    Carlos estaba muy herido, molesto y humillado, pues de entre todas las cosas, nunca imaginó que una muer sería la responsable de pelear y romper su amistad con su mejor amigo. No obstante, por mucho que Carlos se negará a creerlo, eso era la realidad, Dany lo había abandonado en nombre de su amor.

    Sin embargo, lo que fue el final para Dany, no lo fue para Carlos, quien por sobre todas las cosas, estaba dispuesto a recuperar a su mejor amigo, llevándolo a un solo resultado.

-No pensé que poseer el cuerpo de alguien fuera posible, pero ese hechizo funcionó de verdad. No tengo la menor duda de que ahora poseo el cuerpo de ese maldita bruja que me separó de mi mejor amigo-

    Carlos no estaba dispuesto a perder a su mejor amigo, por lo que usando un antiguo hechizo que encontró en Internet, logró poseer el cuerpo de Linzy, comprobando que en serio era ella frente al espejo de su habitación.

-Cabello rojo, ojos cafés, ropa ajustada, todo concuerda con Linzy, incluso tengo su misma voz, así que no puede haber falla alguna con este hechizo-

    El joven pasaba lista de todos los rasgos y características que conocía de Linzy para estar seguro de que era ella, de que él estaba en el cuerpo de la novia de su mejor amigo, y una vez que aceptó que la posesión de cuerpos fue exitosa, comenzó a debatirse por cual sería su próximo movimiento.

-¿Qué es lo que debería hacer? Podría comportarme como toda una perra y romper con "mi novio", de esa forma Dany tendría el corazón roto, Linzy no sería un problema y él y yo podríamos volver a ser amigos-

    Esa era la primer idea que se vino a la mente del chico ahora que poseía el cuerpo de la pelirroja.

-Eso sería lo mejor... sería lo más sencillo, romper su relación los distanciaría por completo y me daría la oportunidad de recuperar a mi amigo.... entonces, si es tan buena decisión, ¿Por qué no me siento cómodo con eso?-

    Se cuestionaba con intranquilidad el chico, pensando que por muy perfecto que fuera su plan, podía encontrar otra solución, otra forma de actuar y otra forma de poder pasar más tiempo con su mejor amigo.

-Supongo que... primero podría hablar con él. Hace algunas semanas que dejamos de hablarnos, ante de lastimarlo, me gustaría saber como ha estado sin mí, quizás podríamos jugar o ver un partido como antes de nuestra pelea, y apuesto a que su novia no hace nada de eso, por lo que se divertirá conmigo como en los viejos tiempos-

    Una pequeña sonrisa se esbozó en el temporal rostro de Carlos, quien usando el teléfono de Linzy, no dudó en enviar algunos mensajes "a su novio" para que tuvieran una cita lo antes posible y que así Carlos cumpliera con sus deseos de pasar más tiempo con su mejor amigo.

Créditos a quien correspondan.

    Una semana ha pasado desde entonces, y desde ese día, Carlos no ha dejado de utilizar el hechizo de posesión de cuerpos todos los días, para ir y venir del cuerpo de Linzy para tener citas con su antiguo mejor amigo.

-Hoy iremos al estadio, debería utilizar esta blusa, es muy linda y cómoda. Me pregunto si Dany me compraría una playera del equipo si se la pidiera-

    Se decía a si mismo Carlos mientras se ponía bonita en el cuerpo de Linzy horas antes de su cita para impresionar a su novio.

    El primer día las cosas no salieron del todo como había planeado, y lejos de romper su relación, Carlos fue el encargado de hacer aún más cercanos a la amorosa pareja, pues "repentinamente" Linzy había puesto mucho más interés en todas las aficiones de su amado novio. La coartada de Carlos fue muy sencilla, "si te importa, a mi me importa", por lo que prestar atención a todo lo que antes hacían juntos Carlos y Dany, ahora lo hacían juntos Linzy y Dany, sin que el chico tuviera la menor idea de que su antiguo mejor amigo estaba dentro del cuerpo de su novia.

    Después de esa primera cita de Carlos en el cuerpo de Linzy, el joven no dudó en volver a poseer el cuerpo de la pelirroja al día siguiente, y al día siguiente, y también el siguiente día, poseer durante horas el cuerpo de Linzy se volvió parte de la rutina de Carlos, todo con el fin de pasar más tiempo con quien fue su mejor amigo, y que de cierta forma, ahora estaban teniendo una relación mucho más profunda.

    Dany ya estaba perdidamente enamorado de la encantadora pelirroja, así que cuando Linzy comenzó a aplastarlo en los videojuegos, ver juntos películas de universos extendidos y ser una experta en los deportes compartiendo el gusto por los mismos equipos, Dany se enamoró de una forma tan aposesionada que era difícil de poner en palabras, pero sobre todas las cosas, era muy difícil de rechazar, algo de lo que muy tarde se daría cuenta su antiguo mejor amigo.

-Ese maldito, muchas veces le dije que fuéramos juntos al estadio para ver a nuestro equipo pero siempre tenía alguna excusa o algún pretexto, pero el día que le dije que yo era aficionada del mismo equipo, no dudó en gastar sus ahorros para ir juntos al estadio-

    Se quejaba el chico mientras se cepillaba el cabello y luego se comenzaba a maquillar.

-Bueno, si ya gastó su dinero, lo menos que puedo hacer para él es lucir muy bonita. Quiero decir, hacer que Linzy se vea bonita-

    A pesar de toda la semana que ambos había vivido, Dany no era el único que había tenido muchos cambios, Carlos se había dado cuenta de muchas cosas distintas en su mejor amigo, sin tener la menor pista o idea de que él mismo se estaba convirtiendo en alguien más femenino tal como la verdadera Linzy sin tener idea de ello.

    La bella pelirroja no solo se había vuelto hábil en los videojuegos o en los deportes, también toda la semana comenzó a prestar más atención a su imagen; a ser un poco más detallista con su maquillaje, a ponerse su mejor ropa cada que se veía con su novio, usar un poco más de perfume para que él la recordará y muchas cosas más que Carlos había comenzado a hacer sin siquiera notarlo, actuando incluso más femenina que la propia chica a quien le quitaba su cuerpo para pasar tiempo con su novio.

    Carlos no lo notaba, pero cada día se comportaba un poco más como la verdadera Linzy, permitiendo que su novio la abrazará, la cargará, incluso le permitió dar algunos besos en sus mejillas, y aunque no le había permitido besar sus labios o tener una noche juntos, cada día que pasaban juntos la idea era más humillante y tentadora por partes iguales.

-Quizás debería mantener la distancia, estar en mi cuerpo... en el cuerpo de Linzy no es bueno... así que después de está noche, después de ver el partido, prometo dejar tranquilo a mi nov... dejar tranquilo a mi mejor amigo para que disfrute estar con su pareja-

    Tras varios suspiros e intentos de corregir sus propias palabras, Carlos terminaba de ponerse el labial y rubor favorito, en espera de que su novio le diera una cita maravillosa por última vez antes de terminar con todo.

Créditos a quien correspondan.

-Bueno, las cosas no siempre salen como uno espera-

    Se decía con resignación y soltando un gran suspiro Carlos, o mejor dicho Linzy, pues desde hace un mes ininterrumpido, lleva atrapado en el cuerpo de la pelirroja.

-Y todo por está estúpida cosa-

    Por un momento la chica apretó el collar con furia, algo que rápidamente dejó de hacer antes de volver a suspirar y revisar que el collar luciera perfecto en conjunto de su escotada blusa.

-¿A quién le quiero mentir? Me gustaría poder culpar a este collar, pero sí me quede atrapado de está forma fue por mi propia tontería. No puedo creer que fui una chica tonta que con un detalle bonito, le abrió las piernas a su novio-

    Los planes pueden cambiar de forma drástica ante el menor problema, y justo eso fue lo que le sucedió a Carlos hace un mes en su última cita con Dany.

    Carlos estaba listo para dejar de usar el cuerpo de la pelirroja una vez terminado el partido en el estadio. Sin embargo, durante el medio tiempo del partido, una enorme cámara enfocó a la pareja de enamorados para darse un beso frente a todo el estadio.

    El chico sabía que eso podía pasar, de hecho pensaba que eso era una ridiculez que nunca quería experimentar, y sin embargo, ahí estaba él en el cuerpo de una chica a punto de recibir un beso de su novio. La presión y la sorpresa vencieron a Carlos, quien tímidamente asintió para que Dany le besará de forma apasionada y amorosa provocando una ovación por parte de todos en el estadio; la feliz pareja se volvió el centro de atención por un momento, mismo momento que se extendió un poco más cuando Dany sacó de su bolsillo un precioso collar de plata que le colocó a su novia. 

    El chico ya se había rendido para ese momento, y aunque puso todo su empeño en ver el partido, no podía dejar de besar, abrazar y estar bien cerca de su encantador novio. Carlos pensó que sería divertido y un pretexto perfecto besar a su novio cada que el equipo anotará un equipo, lo que para su buena o mala fortuna, terminó en una aplastante goleada, que a su vez se convirtió en una oleada de besos en la feliz pareja.

    La idea era que terminado el partido, Dany llevará a su chica hasta su casa y ahí Carlos dejaría para siempre el cuerpo de Linzy. 

    La realidad a la que se enfrentaron, fue una donde Carlos ya no pudo controlar su amor y sus deseos, yendo a la casa de su pareja y pasando la noche juntos por primera vez.

    A la mañana siguiente la cruda realidad y humillación invadió a Carlos, pues la cama donde alguna vez durmió y jugó videojuegos con su mejor amigo, ahora había sido la cama donde ella gimió como toda una sucia señorita, y pasó la noche desnuda en los brazos de su hombre. 

    En ese momento Carlos lo había entendido, ya no era más un hombre, era la novia de su mejor amigo, y por mucho que quisiera negarlo u olvidarlo, la noche que pasó con Dany era una que jamás en su vida podría olvidar, de una forma bastante literal.

    Cuando Carlos quiso volver a su cuerpo, se dio cuenta de que no podía, pasar la noche con su mejor amigo había hecho la posesión de cuerpos permanente, por lo que desde esa noche donde la pareja consumó su amor, también fue la misma noche donde Carlos perdió su cuerpo de chico para quedarse para siempre con el cuerpo de Linzy. Desde entonces el joven ha intentado de todo para volver a su cuerpo; hechizos, magia y maldiciones, pero sin importar todo lo que haga, nada puede regresarlo a su cuerpo.

-He intentado de todo pero no parece que haya algo capaz de regresarme a mi cuerpo, ¿Acaso ya debería resignarme a que está es mi vida?-

    Se decía frente al espejo el chico, ajustándose la blusa mientras pensaba que aún si en sus palabras había insatisfacción, lo cierto es que lleva todo un mes pensando, vistiendo y actuando tal como lo haría Linzy, al punto de que nadie tiene la menor idea sobre el cambio que la chica ha vivido.

-¿Qué otra cosa tengo si no puedo recuperar mi cuerpo? Si ya no hay solución, creo que olvidarme de mi antigua vida sería lo mejor-

    Pensar que no volvería a ser Carlos, pensar que no recuperaría su vida, y pensar que de ahora en adelante él se convertiría en una chica por completo no es algo que le hiciera feliz, incluso si era por estar con Dany el precio era bastante caro, sobre todo al pensar que ella era la mujer con quien se acostaba su mejor amigo.

-Recordar esa noche todavía me hace estremecer, en especial al contar los días, cada día me preocupo un poco más, ¿Debería decirle algo a mi novio?-

    Por si haber perdido su cuerpo fuera poca cosa, Carlos se enfrentaba también a un problema que nunca imaginó: el riesgo de convertirse en madre.

-No puedo estar segura de eso, pero creo que mi cuerpo estaba en unos de esos días donde podría estar embarazada... ha pasado un mes desde entonces, y si no me viene la regla en un par de días o semanas cuando mucho, puede que esa noche después del partido, yo haya quedado embarazada-

    La idea de estar embarazada mientras veía su vientre plano le hacía estremecer, pensando que esa hermosa figura que tanto cuidaba cambiaría por completo para dar vida a una personita dentro de ella.

-Ya es malo haberme convertido en Linzy, pero en definitiva no quiero convertirme en una madre tan pronto. En definitiva no quiero, además, ¿Cómo reaccionará Dany cuando se lo diga?-

    Gritarle, regañarla, romper con ella, toda clase de malas ideas llenaron la cabeza de Linzy al pensar en estar embarazada y tener que decírselo a su novio. No obstante, tan pronto como las malas ideas terminaron de aparecer, una lluvia de hermosas posibilidades se abrió para ella.

-¿Y si me acepta?, ¿Qué tal si me convierto en ama de cas?, ¿Sería capaz de pedirme matrimonio? Por dios, apenas tenemos un mes de relación... quiero decir, ellos tenían más tiempo de novios... aunque yo conozco de años a Dany... si alguien lo conoce mejor, soy yo...-

    Mientras su cabeza se llenaba de ideas, Linzy no pudo evitar posar frente al espejo y decir.

-¿Me vería bonita usando un vestido de novia?-

    Esas palabras hicieron sonrojar a Carlos, negándose muchas veces con la cabeza y tratando de mantener la compostura ante toda la situación.

-¿En que momento cambie tanto? Me cuesta creer que sigo siendo la misma persona... No, en realidad no soy Carlos, desde hace un mes deje de ser Carlos... me guste o no mi nueva vida es como Linzy, y ahora tengo que afrontar los problemas que yo misma me busqué-

    Se decía la pelirroja con vergüenza y determinación.

-Tengo que hablar con mi novio, estoy segura de que estaremos juntos después de esto, él nunca me abandonaría y esto es solo un pequeño problema en nuestra relación... Estoy segura de que podemos resolverlo-

    Armándose de valor, y confiando ciegamente en su amada pareja, Carlos no tenía más remedio que aceptar su nueva vida como la novia de su mejor amigo; aceptando que su error de una noche al tener relaciones con Dany le costó su vida como hombre, por lo que ahora le tocaba convertirse por completo en Linzy, una amorosa y femenina novia que debe estar lista para afrontar su más grande problema hasta ahora, confiando plenamente en que su amado novio acudirá al rescate de su doncella.

    Ser la damisela en apuros nunca estuvo en los planes de Carlos, pero ahora que se ha convertido en Linzy, tomará en rol necesario para no perder a la persona que más ha amado en sus dos vidas.

Créditos a quien correspondan.