viernes, 6 de septiembre de 2024

Una pelea de hermanas

-¡Hermanita!, ¡Te ves adorable!, Ese atuendo sin duda es el mejor para alguien tan infantil como tú-
    Decía la joven Anastasia para burlarse de su hermana menor Bianca, quien utilizaba un atuendo bastante extraño para una chica de su edad; cabello trenzado, diadema con orejas de conejo, una enorme sudadera que le quedaba como un vestido hasta los muslos con mangas tan largas que escondían sus manos, zapatillas blancas y un enorme pañal con dibujos que era imposible de ignorar; a pesar de tener casi 13 años, Bianca llevaba un atuendo digno de una niña 10 años más pequeña; o mejor dicho, unos 20 años si hablamos de la persona atrapada en el cuerpo de Bianca.
    Bianca de 12 años estaba bajo el cuidado temporal de su hermana mayor, Anastasia de 25 años, quien de mala gana aceptó cuidar a su hermana menor mientras sus padres iban a celebrar su aniversario durante unos días.
    Anastasia y Bianca no tenían la mejor relación, pues con más de 10 años de diferencia de edad, las etapas de vida de cada una han sido muy distintas; mientras una entraba a la primaria la otra ya estaba en la universidad; cuando a la joven hermana menor le gustaban las princesas y películas animadas, su hermana mayor ya era tratada como una princesa por algún chico con el que estuviera saliendo; la diferencia de edad que había entre ellas nunca les permitió ser buenas amigas o mejorar su relación, y aunque ambas chicas intentan llevarse bien, las peleas entre ellas son constantes como en cualquier otra relación de hermana menor y hermana mayor.
    Esta ocasión no fue una excepción, ya que apenas llegar a su antigua casa, Anastasia comenzó a burlarse de su hermana menor por "ser una niña pequeña que todavía necesita supervisión"; Ana no perdió oportunidad de alardear todo lo que ella hacía a la edad de su hermana menor, lo responsable que era, lo inteligente que era, lo buena hija que era, y destacar todo pequeño aspecto donde superaba a su infantil hermana menor. 
    La astuta hermana menor, respondió a todos esos comentarios con "burlas infantiles" haciéndole saber a Anastasia que ser una hermana mayor aburrida y amargada no la hacía alguien interesante, y que a ojos de ella, Ana era mucho más infantil que la propia Bianca al tener la necesidad de demostrar quien era la mejor entre las dos, y que no porque Anastasia fuera la hermana mayor significaba que fuera la mejor.
    Solo hicieron falta unos minutos desde que las hermanas estaban reunidas para comenzar una discusión donde se despreciaban y burlaban la una de la otra, siendo cada vez más creativas con los insultos, insinuando cosas groseras mutuamente, alzando más y más la voz hasta que la hermana menor de casi 13 años, quiso terminar y ganar la discusión de una manera tan aplastante que haría a su hermana mayor no volver a molestarla por el resto de su visita, o con algo de suerte, no volver a molestarla nunca más.
    En mitad de su discusión, Bianca sacó de su bolsillo un pequeño frasco cerrado con un liquido rosado, jurando a su hermana Anastasia que se arrepentiría y momentos después la joven lanzó el frasco contra el suelo. Como era de esperar, el frasco de cristal se rompió en mil pedazos, provocando que una enorme cortina de humo rosado llenara la habitación donde estaban ambas hermanas; Anastasia intentó abrir la ventana y sacudir las manos para disipar el humo, pero antes de que sus esfuerzos dieran resultados, ella había caído al suelo dormida.
    Algunas horas habían pasado desde que Ana se quedó dormida, teniendo el despertar más duro de su vida cuando vio lo que le sucedió.
-¿¡Pañales!?, ¿¡Y trenzas!? Por dios, me veo como una mocosa de esta forma, ¿¡Qué le paso a mi cuerpo!? No quiero verme de esta forma, voy a quitarme la ropa-
    Anastasia al ponerse de pie y mirar su atuendo se sonrojó como nunca antes, bajando el cierre de su sudadera solo para subirlo de inmediato al ver otro detalle en su aspecto.
-No llevo nada debajo... no puedo quitarme esto a menos que quiera andar desnuda....-
    Susurró sin entender que es lo que había pasado no solo para terminar con esa humillante ropa, también no tenía ni la menor idea de porque estaba en el cuerpo de su mocosa hermana menor.
-Así es, no llevas nada debajo "hermanita". Tú siempre dices que por estar plana no necesito usar un sostén, así que me tomé la amabilidad de quitarte mi sostén y ponerte ropa más cómoda para ti-
-Bianca... ¿Tú me robaste el cuerpo?-
    Pregunto con incredulidad Anastasia, mirando como su propio cuerpo de joven adulta se movía y le hablaban sin que ella tuviera algo que ver. Lo cual solo le hizo tener una idea: si Anastasia estaba en el cuerpo de Bianca, su hermana menor debería estar dentro del cuerpo de la hermana mayor.
-Robar es algo exagerado... si te sirve de algo ni yo misma esperaba este efecto. Yo quería que la pócima que vi en internet te convirtiera en una niña más pequeña que yo, pero supongo que en algo me equivoqué que ambas terminamos intercambiando de cuerpos-
    Explico la joven hermana menor dentro del cuerpo de su hermana mayor, disfrutando de ver como Anastasia estaba tan avergonzada y vulnerable tras el incidente que Bianca provocó durante su discusión.
-Esto no es divertido, mocosa. Quiero volver a mi cuerpo, y lo quiero ya-
    Exigió la hermana mayor atrapada en el cuerpo de su hermanita, tratando de estirar lo más posible la sudadera para cubrir sus piernas y tratando de ignorar la incomoda sensación de estar vistiendo un pañal tan abultado.
-No puedo creer que me hicieras esto, toda esta porquería debes haberla planeado desde hace tiempo-
-Desde que papá y mamá me dijeron que tú vendrías a cuidarme. Este plan era un "por si acaso", si tú eras grosera conmigo lo usaría, estaría lista para defenderme si comenzabas a burlarte, pero no espere que apenas abrir la puerta en lugar de saludarme comenzarás a criticarme. Todo esto es tu culpa por ser una mala hermana mayor-
    A diferencia de la hermana mayor que se mostraba tímida y avergonzada en el cuerpo de su hermanita, Bianca se mostraba segura, con mucha confianza en sus palabras y en que su plan funcionaría de maravilla incluso con los cambios imprevistos que había sufrido.
-Es vergonzoso mirarme a mi misma usar esa ropa, pero veo que te queda de maravilla; volverte una mocosa en tu propio cuerpo y vestirte como una bebé era un castigo perfecto, pero creo que hasta es mejor tenerte atrapada en mi cuerpo vistiendo como una mocosa; el cuerpo que tanto odias y del que siempre te burlas es ahora donde estás atrapada usando linda ropita de una niña mucho más pequeña de lo que eres, "hermanita"-
    Sus burlonas palabras terminaron al tocar un par de veces el trasero de Bianca, estrujando el pañal para asegurarse que seguía limpio para total burla y humillación de la atrapada Anastasia.
-¡Ya déjate de bromas, Bianca! Soy tu hermana mayor y debes obedecer lo que yo te diga si no quieres estar en problemas-
    Ante las amenazas de Anastasia, Bianca solo se echó a reír a carcajadas, señalando la realidad a la que se enfrentaban.
-¿Me acusarás con mamá y papá? Eso es de nenas pequeñas, o al menos es lo que siempre me decías para no involucrarlos. Sin embargo, apenas llevas unos minutos en mi cuerpo cuando ya estás pensando en acusarme como la mocosa que siempre has sido-
-¿Quién dijo algo de acusarte, niña tonta? Yo misma puedo-
-¿Qué puedes hacer?, ¿Qué puedes hacer?, Adelante, dímelo, Bianca-
    Las amenazas vacías de Anastasia fueron calladas en un solo momento por su hermana menor, quien explicaba de manera detallada a todo lo que ahora se enfrentaba Ana.
-Te recuerdo que estás en mi cuerpo; no tienes móvil, ni dinero ni a quien pedir ayuda; no tienes ni ropa adecuada para salir de casa; por no mencionar que ahora tampoco me ganas en fuerza; y por último, solamente yo soy capaz de volverte a la normalidad-
    Escuchar todo eso hizo que la valentía y orgullo que mostraba Anastasia aún con su nuevo aspecto desapareciera por completo, dándose cuenta que en estos momentos tenía todas las de perder, siendo su única posibilidad de recuperar su cuerpo y su vida, ganarse el favor de su hermana menor.
-Veo que lo empiezas a entender. Solo mírate, a pesar de ser una mocosa en pañales todavía puedes pensar-
    Bianca apretaba las mejillas de su verdadero cuerpo para fastidiar a su hermana mayor; Anastasia siempre hacía eso para molestar a Bianca, y ahora que ella vivía ese castigo en carne propia, no pudo hacer más que quedarse quieta hasta que Bianca se cansará de avergonzarla.
-Tengo un juego en mente, "hermanita" así que escucha con atención: a partir de ahora tú eres Bianca y tú serás la hermana menor, así que te debes comportar como tal; tienes hora para ir a la cama, comerás lo que yo diga, debes obedecer todas mis reglas, vestir lo que yo te diga, y a menos que quieras ensuciar tus pañales, deberás pedirme permiso para ir al baño cada ocasión; si tú no obedeces o rompes las reglas del juego, te quedarás un día más en mi cuerpo; y si eres una buena hermanita menor, yo te devuelvo a la normalidad al final del día. Divertido, ¿No lo crees?-
    Anastasia quería responder que no, que era la cosa más cruel y humillante que jamás escuchó, por no mencionar la sensación de que olvidaba algo. Sin embargo, tuvo que obligarse a sonreír y asentir mientras extendía la mano a quien controlaba su cuerpo autentico.
-No es que tenga otra, ¿No es así?-
-Bueno, tú otra opción sería quedarte con mi vida para siempre; así yo voy y me hago toda una adulta, mientras que tú vuelves a ser una mocosa infantil como tanto te burlabas de mi, quizás volviendo a ser una niña aprendas todo lo que no sabes de ser buena persona-
    Esa alternativa que ofrecía Bianca definitivamente era mucho peor para Anastasia, que por mucho que su orgullo le doliera, ya sabía cual era su decisión.
    Las hermanas estrecharon las manos para dar inicio formal a su juego, con Anastasia temblando de vergüenza por como sería su vida durante los próximos días al cuidado de su hermana y viviendo como una mocosa, al mismo tiempo que Bianca sonreía e hinchaba el pecho con orgullo al tener justo donde quería a su hermana mayor; sintiéndose la mejor de las dos al haber ganado esta disputa, superando de gran manera a su hermana Ana; esperando que este humillante castigo fuera digno de zanjar todas las peleas de hermanas que ambas pudieran tener; después de todo, el juego apenas está por comenzar, pero sin duda la victoria la ha tenido desde hace mucho la formidable hermanita menor que pasará su fin de semana humillando y castigando a su querida hermana mayor.
Créditos a quien correspondan.

8 comentarios:

  1. La verdad ya está esperando algo muy muy bueno pero esto superó mis expectativas me encantó!!!

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    1. Me alegra mucho que haya sido de esa forma, Chimada. Disfrute al escribir su petición, y por su reacción, valió totalmente el esfuerzo.
      -Nero.

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    2. Ninguna de tus historias decepciona eres grande nero

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    3. Me hace muy feliz saber que piense eso de mí, solo intento dar lo mejor para que ustedes tengan un lindo rato al estar por nuestro blog. Muchas gracias, Chimada.
      -Nero.

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  2. PUEDES DARLE CONTINUACION TIENE POTENCIAL PORFAVOR

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    1. No lo descarto para el futuro, pero de momento tengo muchos pendientes que seguir escribiendo. Aún así gracias por su apoyo, Kiler. Espero no sea la última vez que le vea comentar.
      -Nero.

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  3. me encantan las historias de inversion de papeles y especialmente si son age plays

    ojalá haya una continuación o más de ese estilo <3

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    1. Ya sea continuación o más historias de este estilo serán para después, por ahora quiero terminar las peticiones restantes de la comunidad.
      -Nero.

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