lunes, 30 de septiembre de 2024

La elegida

-Por favor... por favor... no más... no puedo más-
    Decía de forma sumisa y suplicante la preciosa aspirante a modelo, siendo embestida vez tras vez por el hombre interesado en sus servicios.
-Claro que puedes, solo un poco más, jovencita. Ya casi quedo satisfecho de usar tu cuerpo.
    Sujetando desde atrás por las caderas a la chica, el hombre alto, musculoso y algo apuesto para su edad, también besaba el cuello de la joven, que aún si intentaba negarlo, disfrutaba del momento con aquel guapo hombre.
-En serio... ya no me interesa ser su modelo.... y tampoco... tampoco me interesa su otra extraña oferta-
    La sumisa respuesta de la chica iba acompañada de jadeos, algo que solo hizo sonreír al hombre que sin dudar dio una juguetona nalgada a la joven para murmurar cerca de su oído.
-Sin embargo, veo que sí te interesa mucho lo bien que te hago sentir, señorita. No te preocupes, tengo muchas experiencia con el cuerpo de una joven de tu edad, así que no tiene nada de malo que supliques por más-
    Ante esas palabras la modelo no pudo responder, el hombre tenía razón y de una manera sumamente precisa y placentera, la joven modelo estaba contenta, disfrutando por completo del sexo que tenía con aquel hombre maduro. El hombre era duro con ella, pero también muy seductor y tocaba todos sus puntos más delicados, provocando que la chica apenas pudiera mantenerse de pie al sostenerse de la pared.
-¿Cómo lo hace... señor?-
-¿"Hacer" que, señorita?-
    La joven se sonrojó un poco antes de responder.
-Ya sabe.... hacerlo tan bien...  mis novios nunca me habían hecho sentir como usted lo hace... debe ser un experto en hacer felices a las mujeres.... lo bien que me hace sentir vuelve muy tentadora su oferta y aceptar el trato que ofreció-
    Aquel hombre de cabello negro con algunas canas no podía sentirse más contento de escuchar esa respuesta, sintiéndose orgulloso que aún con su edad pudiera hacer babear de placer a las señoritas que encontraba en su camino, como la modelo que tiene ahora mismo, o las varias modelos más que poco a poco se han ido de su mansión en cuanto recuperaron el aliento.
-Muchas gracias, señorita. Tú tampoco lo haces mal, sin embargo, temó decir que alguien ya aceptó mi trato-
    Por un momento la mirada perdida en placer de la modelo se volvió una más alerta, tratando de mirar detrás de si misma para hablar con hombre con quien lo hacía.
-¿Alguien ya aceptó? Pero si todas las otras aspirantes a modelos se fueron, ¿Quién aceptó?-
    Una vez más el hombre solo sonrió, aumentando el ímpetu de sus embestidas para doblegar de inmediato en el placer a la última aspirante que restaba por estar completamente satisfecha.
-¿Acaso importa?, ¿No me digas que te estás arrepintiendo de tu decisión, señorita?-
-N-no.... no es eso... sigo... sigo sin creer que sea real... pero si lo es...-
    La joven de largo cabello oscuro, con un vestido desordenado y pensamientos aún más caóticos que su ropa, no pudo terminar de aclarar sus ideas puesto que su cuerpo le traicionó, llegando al clímax de su placer sin que pudiera controlarlo, soltando un largo gemido mientras su cuerpo se debilitaba y aquel maduro hombre la sostenía hasta dejarla descansar en una cama cercana.
-Así es, señorita. Si su idea era correcta, acabas de hacerlo con la chica elegida para quedarse con la vida del señor Bruce-
    Las palabras del hombre demostraban una mezcla de placer y malicia que por desgracia no tuvieron respuesta.
-¿Me escuchaste, señorita?, ¿No?, Cielos, parece que soy demasiado buena con esto, todas las chicas han acabado tendidas y sin aliento, eso me gusta-
    El hombre abrió su billetera, sacando un par de billetes de grandes cantidades para dejarlos junto a la exhausta aspirante a modelo y decir.
-Gracias por tu participación, pero no has ganado. Puedes ducharte e irte a casa, señorita-
    Dando una última nalgada juguetona a la joven, el maduro hombre Bruce no perdió tiempo y se acomodó la ropa para salir rumbo a la habitación contigua de donde unos gemidos no dejaban de salir, lanzando una pregunta directa a la dueña de los gemidos antes de siquiera entrar a la habitación.
-Nada mal para mi primer día, ¿No es así, Bruce?-
Créditos a quien correspondan.
    En la habitación aledaña donde Bruce llevaba horas divirtiéndose con muchas hermosas señoritas, se encontraba una chica fisgona que veía con deseo y detalle todo lo que el hombre hacía con sus candidatas, dándose placer por si misma sin despegar el ojo de lo que las múltiples parejas hacían en la otra habitación.
-Por lo que veo tú también te estás divirtiendo, ¿Qué te parece mi cuerpo de chica, Bruce?-
    Preguntaba con orgullo la joven dentro del cuerpo del hombre maduro, observando como su cuerpo anterior, se apoyaba contra la pared mientras sus dedos se movían sin parar bajo su ropa interior.
-Por favor... llámame, Marieta... incluso si estamos solos... debes acostumbrarte a tu nueva vida, Bruce-
    La joven de largo cabello oscuro intentaba reprender a su compañero y ser la voz de la razón en esa situación. Por desgracia, al estar tan concentrada dándose placer a si misma, sus palabras apenas podían entenderse, y lejos sonar como un regaño o una llamada de atención, sonaban como una preciosa suplica para seguir disfrutando de lo que estaba haciendo.
-Esta bien, ¿Todo bien con mi... tu cuerpo, Marieta?-
    Una sonrisa apareció en el rostro de la joven, no se sabía si era una sonrisa de alegría por obedecer sus ordenes, o una sonrisa de satisfacción por el placer que sentía, pero sea como sea, esa preciosa y pervertida escena era algo que ninguno de los dos podría olvidar.
-Mucho mejor de lo que espere-
    Respondió sumido en el placer el anterior Bruce, un hombre en sus 50 años, excéntrico,  multimillonario y que ahora poseía el cuerpo de Marieta, una joven hermosa y sensual que había sido la valiente elegida para intercambiar de cuerpos con Bruce.
    El día anterior, Bruce había llevado hasta una parte de su mansión a muchas jovencitas de preciosos cuerpos, lindas caras y atractivos atributos al ofrecerles becas de modelaje a quienes aprobaran su entrevista. Las jóvenes no dudaron de su palabra, pues el bueno de Bruce a lo largo de los años se había hecho de una buena reputación como multimillonario, por lo que si las chicas no conseguían la beca, al menos obtendrían dinero o buen rato con el apuesto hombre.
    Para sorpresa de todas y cada una de las aspirantes a modelo, durante sus entrevistas había una pregunta que no sabían como responder, por no decir que sus respuestas eran erróneas y les hacían ganar un "suerte para la próxima" o "yo te llamo".
    Sin embargo, entre todas esas chicas había una que respondió mejor de lo que esperaba Bruce, esa chica se llamaba Marieta, cuyo mejor rasgo era una cintura de reloj de arena, cabello largo y con el resto de sus atributos aceptables para Bruce.
    La pregunta que Marieta supo responder fue "¿Te gustaría ser yo?", todas las demás chicas pedían una explicación a la pregunta, pensaban que era una broma o nerviosamente respondían que no. Por su parte, al oír esa pregunta Marieta sonrió de forma pervertida, diciendo que sería todo un honor convertirse en un apuesto y maduro multimillonario para gastar su dinero como más quisiera y pasar sus días cogiéndose a cuanta chica preciosa se encontrará en su camino. Bruce solo esperaba que alguna de esas chicas dijera que sí, pero la respuesta explícita y detallada que dio Marieta fue justo lo que necesitó para estar seguro de darle su cuerpo y su vida a la señorita.
    De esa forma Bruce y Marieta acordaron los detalles de su intercambio, cerrando el trato cuando el hombre entregó un extraño y antiguó medallón a la chica, que una vez que se lo colocó, hizo que ambos cambiar de cuerpos entre ellos. Una vez que su intercambio se completó, ambos fieles a su palabra comenzaron a aprovechar sus cuerpos al momento; con Bruce llamando de nuevo a cada chica a su oficina para darles un premio de consolación, mientras que en la habitación contigua Marieta observaba todo y se satisfacía con cada cosa que las parejas hacía.
    Después de horas donde cada uno sacó el máximo provecho de su cuerpo de forma inmediata, Bruce y Marita se van las caras nuevamente, aunque la joven parece tener un poco más de energía que su contraparte mayor.
-¿Ya terminaste o necesitas ayuda?-
    Preguntaba Bruce al ver a su anterior cuerpo que poco a poco dejaba de jugar con su cuerpo al estar contenta.
-Unos minutos más... ya casi estoy lista... ¿Quieres hablar de los detalles de nuestro acuerdo? Pensé que te tomaría más tiempo tomar esa decisión-
    Decía casi sin aliento la joven, haciendo sonreír a su pareja.
-Estaba segura... seguro desde que acepté el medallón, así que en cuanto termines quiero hablar del resto de nuestros acuerdos, Marieta-
Créditos a quien correspondan.
    Los meses pasaron desde el intercambio de cuerpos entre Bruce y Marieta, quienes tal como habían prometido, no solo asumieron la vida uno del otro, también unieron sus vidas en matrimonio para apoyarse y seguir sacando los máximos beneficios.
    Bruce ha seguido su vida como hombre de negocios, haciendo algunas apuestas inteligentes que dieron grandes beneficios a su empresa, además de empezar su proceso de retiro poco a poco en la empresa para dejar sus funciones y responsabilidad a alguien más mientras él sigue siendo el dueño de la empresa y quien mayor ganancia obtiene por la misma. Dirigir la empresa fue un poco difícil al comienzo, pero gracias a la ayuda y consejos que Marieta le dio, el trabajo se volvió mucho más sencillo, dándole más tiempo a la amorosa pareja para estar juntos.
    Una vez que Marieta dejó de ayudar a su marido con las cosas del trabajo, su marido decidió que lo mejor para ella era volverse un ama de casa linda y obediente, que nunca se viera en la necesidad de pensar en las cosas complejas de la vida, todo lo que Marieta tenía que pensar era en como verse bonita y como tener muy satisfecho a su marido, tal como decía su acuerdo.
    Marieta no quería estudiar ni tampoco quería tener que volver a trabajar en su empresa al menos por unos años, quería descansar y tener placer todos los días, además que alguien que no fuera ella tenía que encargarse de todas las cosas complejas que hubiera en su día a día. Bruce aceptó todas estas peticiones a cambio de volverse la mejor esposa trofeo que un hombre pudiera desear, y bajo esa premisa, la pareja tuvo una boda y una aún mejor luna de miel.
    Desde entonces Bruce deposita dinero en las cuentas de Marieta, compra todos sus caprichos, la nombró heredera de su empresa y se asegura de que ella no tenga que pensar ni mover un dedo por si misma más allá de como verse bonita, algo que incluso ha ido cambiando según los deseos de Bruce que elige como se debe de vestir ella, como debe de hablar y como lo debe satisfacer cada día a cada momento, mientras que la obediente y rubia Marieta ha abrazado por completo esa vida, haciendo feliz cada día a su amado esposo, y ella siendo la mujer más feliz del mundo, gracias a tener la vida resuelta por su marido para que ella pueda relajarse, no pensar y disfrutar de ser la más hermosa esposa trofeo que pueda existir.
Créditos a quien correspondan.

sábado, 28 de septiembre de 2024

La futura suegra: EPÍLOGO

-¿Qué opinas de este vestido, Matt?-
    Pregunte con una gran sonrisa mientras entraba a nuestra habitación, modelando una de mis varias elecciones para el gran día de mi pequeña y haciendo sonrojar por completo a mi novio en cuanto me miro.
-Señorita Lauren... se ve muy linda, ¿pero no cree que es demasiado para una boda? Perdón, no quiero decirle como vestir... solo que llama mucho la atención-
    Dijo Matt sin poder ocultar muy bien sus nervios al verme en un precioso y ajustado mini vestido dorado con tacones, mostrándole mis mejores ángulos mientras conversábamos.
-Lo sé, pero elegir ha sido muy difícil, amor. No puedo usar blanco o negro que son mis mejores colores; ambos colores son mal vistos en una boda, además ya no soy tan joven para algunas opciones, y definitivamente no soy una abuela para vestir cosas feas-
-Por supuesto, cariño. Usted es muy linda con todo lo que se ponga, así que elegir un vestido debe ser complicado. Yo usaré el traje que me eligió y cuidaré de usted toda la noche para que pueda divertirse-
    Las palabras de Matt me animaron, sin duda elegir un vestido para la boda era una tarea muy difícil, incluso eligiendo entre las opciones que Giselle me sugirió, me cuesta decidir cual será el que utilicé en una de las noche más importantes de mi hija.
    Han pasado algunas semanas desde que Giselle y Mathius se marcharon, su viaje de una semana no fue suficiente para que pudiéramos ponernos al día, pero eso solo les dio el pretexto a mi hija y a su novio de volver a visitarme para tener una cena espectacular donde me anunciaron su compromiso, y donde Mathius me pidió permiso para casarse con mi hija, algo que orgullosamente acepté.
    Mi regalo de bodas era mucho más de lo que mi hija imaginó, pues me ofrecí a pagar todo lo que ella quisiera para su boda. Giselle, fiel a como es ella, intentó negarse o dividir los gastos, algo que yo rechacé rotundamente ya que tanto yo como su difunto padre estaríamos más que encantados en patrocinar un día tan importante para ella. Mi hija lloró y nos abrazamos, lo cual solo fue el inicio de nuestra reconciliación madre e hija.
    Durante las últimas semanas hemos hablado mucho, casi todos los días por mensaje o llamada estamos en contacto... y yo me disculpe una vez más por todo lo que le hice hace unos años, prometiendo que nunca más haría algo tan imprudente, en especial porque tal como mi hija, yo había encontrado una persona con la cual esperaba pasar muchos años de mi vida.
    No voy a mentir, Giselle estaba sorprendida de que mi novio fuera más joven que ella pero lo aceptó muy bien, tal como sucedió conmigo, Matt encantó a mi hija, y aunque dijo que nunca lo llamaría padrastro, ella también me deseo lo mejor en mi relación.
    Puede que un capítulo entre nosotras dos haya cerrado hace mucho, pero tan pronto como ese capítulo cerró, uno nuevo pudo comenzar donde nuestra complicada relación madre e hija no ha hecho más que mejorar.  Giselle es mi hija, y yo soy su mamá, ambas somos adultas y nos mostramos nuestro cariño, uno que no ha dejado de crecer y mejorar desde que me volví la planeadora oficial de su boda soñada.
Créditos a quien correspondan.
-¿Y que hay de este, corazón?, ¿Mejor o peor?-
    Sin vergüenza o duda alguna, me quite el vestido dorado justo frente a Matt para ponerme poco a poco un vestido mucho más largo en comparación, cambiando una mini falda por arriba de la mitad de mis muslos a una falda por debajo de la rodilla. Sin embargo, este vestido era mucho más escotado, llamativo y lo más importante, no era un vestido aprobado por mi hija.
-Señorita Lauren... ese vestido está muy lindo también, luce preciosa... solo que no me parece el mejor atuendo para una boda-
    A Matt todavía le costaba mucho trabajo decirme que no y eso me parecía adorable, no pude evitar reírme mientras modelaba el vestido para él, hundiendo su rostro en mis pechos que casi se salían del escotado vestido.
-Lo sé, amor. Mi hija me echaría de la boda si llego vistiendo esto, pero lo compré pensando que te gustaría a ti-
    Dije con orgullo aún hundiendo el rostro de Matt en mis pechos mientras él ponía sus manos en mis caderas, teniendo problemas para hablar desde su posición.
-Me encantará llevarla a cenar mientras usa ese vestido, señorita Lauren... sin duda resalta todas sus bellezas-
    Las palabras de Matt resonaban en mi pecho, hacían un poco de cosquillas y me parecía aún más adorable de lo que ya es mi muchacho a quien finalmente liberé de mi agarré mientras yo seguía modelando, charlando y jugando con él.
    Matt ha sido mi hombre todo este tiempo, gracias a él y su amor pude acostumbrarme muy rápido a mi nueva vida, y aunque algunas personas ven de forma sospechosa nuestra relación, Matt me ama un montón y me lo demuestra cada día, y yo felizmente correspondo el amor de mi hombre que me acompañara a la boda de mi hija.
Créditos a quien correspondan.
    Cierto, cuando no estoy pasando el tiempo con mi hija u organizando cosas de su boda, estoy con mi amorcito: Matt y yo hemos estado en una relación desde que Giselle y Mathius se fueron a su cuidad, por lo que llevo saliendo con Matt casi 7 meses; estuvimos juntos en secreto por casi 3 meses, después le presente a Giselle cuando mi relación con ella también mejoró, y desde entonces mi amorío con este apuesto muchacho no ha dejado de mejorar día con día; es guapo, amable, atento, siempre me trata como una dama, es un caballero hecho y derecho, por no decir que tal como me prometió, no ha dejado de esforzarse en sus estudios para hacerse de una gran carrera y así comprarme todo lo que le pida... todavía quedan algunos años para que eso pase, pero pacientemente puedo esperar a su lado hasta que ese día llegué.
    En este poco más de medio año que tengo como Lauren la relación con mi Giselle no ha hecho más que mejorar, y ni se diga la relación con mi querido Matt, por lo que me encuentro en una situación mucho mejor que cuando comencé. De hecho me he dado la oportunidad de invertir parte de mi herencia, lo cual ya está comenzando a dar pequeñas ganancias que espero dentro de unos años sean todavía más grandes, aunque haré un gasto y excepción especial en esas inversiones una vez que termine la boda.
    Con respecto a Mathius, es respetuoso conmigo y ya está. Él sabe que no debe meterse conmigo, no debe joder conmigo, y mientras mi hija está presente somos educados uno con el otro, pero si mi hija no lo trae consigo él no se molesta en estar cerca de mi y yo ni siquiera intento preguntar por él. Estoy segura que nadie sospecha nada, solo somos reservados y educados el uno con el otro y eso funciona para mi. Si pudiera decir algo más, adoro ver como se mata trabajando en mi antigua empresa; sin haber trabajado nunca en su vida pero sin poder darse el lujo de renunciar, tengo entendido que se esfuerza un montón para mantener su empleo mientras su tiempo libre lo utiliza para seguir aprendiendo; pasar día y noche esforzándose por tener dinero debe ser un cambio brutal para alguien que siempre tuvo dinero con solo estirar la mano, pero me da gusto que se esfuerce, tanto por ser un castigo por los problemas que me dio, como por ser una muestra de que se está esforzando para darle una buena vida a mi Giselle; ellos son jóvenes todavía por lo que mi mejor consejo es que trabajen mucho y ahorren mucho para luego darse una vida llena de lujos y placeres tal como hago yo.
-Lauren... ese vestido es bellísimo, usted es bellísima.... si me lo permite decir, creo que ese vestido debe usarlo en la boda-
    Sugirió con mucho amor Matt al verme probar la última opción, la cual sería mi elección para la boda de mi Giselle, una la cual estaba cada vez más cerca de comenzar. Quiero decir, aún faltan algunos meses para ello, pero siento que no tenemos tiempo para todo lo que tenemos que organizar.
-Gracias, cariño. Este será el vestido para la boda, solo debo mantener mi figura hasta entonces-
-Por supuesto que lo harás, Lauren... quiero decir, señorita Lauren, usted es asombrosa y sin duda será la segunda mujer más bella en la boda, solo detrás de la novia-
    Elogió una vez más con amor y sinceridad mi Matt, besando mis labios y abrazándome de forma apasionada, encontrando la motivación necesaria para darme una larga "distracción" por el resto del día. Ya elegí mi vestido, mis tacones, accesorios y hasta mi peinado, así que supongo tomarme un momento de disfrute con mi novio no tiene nada de malo.
Créditos a quien correspondan.
    Un año ha pasado desde que me convertí en Lauren, y justo en las vísperas de ese momento, ahora estoy usando un precioso vestido rojo corto y ajustado, con unos tacones elegantes, mis joyas favoritas, con mi cabello recién teñido y bien peinado, además de un maquillaje encantador, todo en conjunto me hace sentir toda una belleza, además que los constantes cumplidos de mi guapo novio es más sencillo sentirme como toda una reina.
    La ceremonia fue hermosa, y para mi sorpresa Giselle me pidió acompañarla hasta el altar... ya que su padre no puede acompañarnos en estos momentos, me pidió tener un momento madre e hija al ser yo quien sostenía su brazo y la entregaba a Mathius para una vez más bendecir su unión. No voy a mentir, lloré un poco en ese momento, también lloró mi pequeña pero eso solo hizo más especial el momento que terminó cuando el novio besó a la novia y todos aplaudimos el momento donde oficialmente se convirtieron en marido y mujer.
    Después de la ceremonia tuvimos una gran fiesta donde seguimos celebrando, seguimos llorando, también bailamos, cantamos, dimos discursos y me lleve una sorpresa más de palabras mayúsculas, pues al final de un discurso de los recién casados, ellos anunciaron que estaban esperando un bebé, por lo que no solo me convertí en suegra ese día, también estaba muy cerca de convertirme en abuela... eso me puso muy contenta, aunque también me hizo sentir muy vieja, apenas tengo 55 años y ya voy a ser abuela... me parece inaudito que mi hija y mi yerno me hagan sentir tan vieja en poco tiempo, sin embargo, ya he comenzado a buscar cosas lindas para comprar a mi futuro nieto o mi futura nieta.
    Una vez que la fiesta terminó, Mathius y Giselle se fueron de luna de miel, una la cual Mathius tuvo que pagar en su totalidad y que por muy barata que haya sido, sin duda la resentiría su bolsillo. 
    Saber que muy pronto sería abuela y ver que mi hija estaba de viaje, me hizo besar de forma apasionada a Matt y hacerle una propuesta que él sin dudar aceptó.
Créditos a quien correspondan.
-Lauren, aquí estás, luces preciosa en ese bikini-
    Me preguntaba Matt al llegar conmigo a la casa de verano que habíamos alquilado por unas semanas, elogiando mi micro bikini naranja que apenas cubría lo esencial de mis pechos y destacaba mucho más mis atributos de abajo con una tanga alta que no dejaba nada a la imaginación.
-¿En serio te gusta? Muchas gracias por decirlo, amor. Pensé que ya estaba vieja para estas cosas-
-Tú nunca estarás vieja para nada, no digas esas cosas, amor. A mis ojos siempre serás una bella señorita a la que amaré por toda mi vida-
    Matt me abrazó por detrás, poniendo sus manos en mi cintura y besando mi mejilla, haciendo muy fácil para mi recostarme en sus brazos, mismos brazos que no han dejado de crecer para estar a la altura de la situación.
    El tiempo no ha pasado en vano, y desde que Matt me conoció entró al gimnasio, y aunque los primeros días estaba super débil y adolorido, ahora con más de un año de entrenamiento constante ese pequeño chico ha crecido bastante; ahora él es mucho más alto que yo, su voz engrosó más y sin duda puede aguantar mucho más que yo en varios sentidos; Matt antes temblaba al intentar cargarme pero ahora le basta uno solo de sus brazos para cargarme e incluso hacer sentadillas conmigo encima; su estamina ha aumentado de maravilla y eso también lo he resentido para buena y mala fortuna; todavía puedo recordar nuestra primera vez hace un año donde lo deje seco y con las piernas temblado; pero ahora con toda su fuerza y energía extra, yo soy quien debe pedirle sea amable conmigo cuando nos acostamos; es vergonzoso para los dos admitirlo pero es como si yo hubiera terminado de criarlo, al menos físicamente ya que en el resto de cosas sigo estando al mando.
    En realidad aún con su físico de hombre Matt sigue siendo el chico lindo, tierno y amoroso del cual me enamoré, además que sigue necesitando un poco de apoyo económico que como su novia no tengo problema en darle de vez en cuando. Tal como sucede ahora, que después de recibir la noticia de que pronto seré abuela, decidí decirle a Matt que nos fuéramos de vacaciones, él estaba de vacaciones en la escuela por lo que era el momento perfecto para hacer maletas, conocer el mundo y disfrutar de nuestra compañía hasta que él deba volver a la universidad, y yo espere la llamada de mi hija para ir al hospital y conocer a mi nieta.
Créditos a quien correspondan.
-Matt, mira, ¿Me queda bien? Me siento como una adolescente usando esto... ni siquiera mi hija se atreve a vestir algo así-
    Dije con cierto orgullo y mucha satisfacción de mi atuendo: tacones altos, unos jeans ajustados y tan cortos como unas bragas, junto a un top rosa que apenas podía contener a mis nenas, me sentía sexy, hermosa, atrevida y como toda una adolescente, algo que parecía emocionar a mi hombre en cuanto me miro.
-Señorita Lauren, usted...-
-Sé que no soy tan joven como las chicas con quienes estudias, pero ya que me elegiste a mi, pensé que lo menos que podía hacer era vestirme como una de esas chicas para darte un poco de esa experiencia, amor. Aquí nadie nos conoce, corazón. Así que déjame darte una cita como si fuéramos unos adolescentes, ¿esta bien?-
    Tras estar semanas en la playa, decidimos ir al extranjero, un lugar donde no quería quedarme atrás de las bellezas locales, usando ropa más atrevida y emocionante que de costumbre y sujetando bien fuerte a mi hombre que estaba más que fascinado por mi atuendo digna de una chica de un tercio de mi edad, y que aún con los años de más, estoy segura que me veo mucho mejor que más de alguna de esas tontas jovencitas.
-¿Esta segura de ello, señorita Lauren?-
-¿Acaso te da vergüenza salir conmigo de esta forma?-
    Pregunté y traté de cubrirme pero de inmediato Matt me tomó por las caderas y besó mis labios para decir algo lleno de determinación.
-Nunca podría estar avergonzada de usted, iremos a pasear, a comer, a pasarla bien, y en la noche intentaré dejarla tan contenta que nunca más dudará de su belleza-
    Tomando mi mano y sacándome de la habitación del hotel 5 estrellas, mi Matt estaba listo para darme otro día maravilloso en su compañía que ha sido el motivo por el cual he disfrutado cada día de esta vida.
Créditos a quien correspondan.
    Por desgracia, después de un par de meses de vacaciones, todo lo que empieza tiene que terminar, y tras tantas semanas en el extranjero, decidimos pasar una vez más a la playa antes de despedirnos por completo, donde decidí usar un increíble bikini negro que cada que Matt me veía usándolo, se ponía como una fiera. Con algo de suerte podríamos hacerlo de nuevo en la playa o en el mar, pero para ello tendría que esperar a que la noche llegará.
    Durante el día hable con mi hija, quien ya estaba a pocas semanas de dar a luz y esperaba con ansias saber si tendría un hijo o una hija, algo que decidió mantener en secreto hasta el día que de a luz, prometiendo que haría la posible para que yo estuviera acompañándola en el hospital.
    En cuanto dijo eso supe que debíamos regresar antes de lo previsto, y para mi buena suerte Matt venía justo a donde estaba tomando el sol. Sin embargo, antes de que yo pudiera decir algo, el chico hizo algo que simplemente me hizo quebrar en llanto mientras asentía y pensaba "Ahí fue donde terminó mi anillo".
-Lauren... sé que llevamos poco tiempo, pero desde el comienzo supe que quería hacer esto... y no sé me ocurre mejor forma de terminar este viaje, más que empezar otro mucho más extenso. Así que, señorita Lauren, ¿Le gustaría casarse conmigo?-
    Matt se puso de rodillas frente a mi, abriendo la caja donde estaba el anillo que hace más de un año yo compre, y que de entre todas las cosas, nunca pensé que pedirían mi mano en matrimonio con aquella belleza. Quizás no era tan lindo para Lauren y Mathius, pero era el anillo perfecto para mí, y estaría encantada de usarlo por el resto de mi vida junto a mi prometido Matt.
    Finalmente hoy es el último día de nuestras vacaciones, donde volveré a casa como una prometida, podré casarme con el amor de mi vida y vivir el resto de mis días felizmente hasta que la muerte nos separé.
    Cuando lleguemos a casa no solo debo preocuparme por cuidar de mi hija y mi futura nieta, también debo comenzar los preparativos de la boda, de mi boda, ya que ahora yo soy la prometida y futura esposa de Matt a quien le daré un adelanto muy especial de nuestra futura luna de miel... No es el atuendo más lindo para una novia, pero es sexy y fue lo mejor que pude improvisar entre mis cosas del viaje para mimar a mi prometido.
    Puede que ya sea una mujer un poco mayor, pero todavía soy joven de corazón, tengo una gran vida por delante, una hija que me ama mucho, una nieta o nieto que ansió conocer, una fortuna que gastar y un joven príncipe digno de cuentos de hada con el cual añoro poderme casarme para tener la vida de marido y mujer con la que siempre soñé desde que conocí a mi Matt.
    Mi vida es maravillosa, no hay nada que pueda envidiar a nadie más, seré la mejor mujer que mi Matt pueda desear y será mi mayor placer caminar con un precioso vestido hasta el altar, donde besaré a mi hombre después de decir "Acepto casarme con él". 
    Sueño como nunca que ese día para ser completamente la mujer de Matt, y hasta que ese día llegué, no dejaré de disfrutar cada momento de mi vida, una la cual me parece imposible sea mejor de lo que ya es, justo ahora soy la mujer más feliz de todas, y con algo de suerte, ese pensamiento seguirá en mi por siempre. 
Créditos a quien correspondan.

viernes, 27 de septiembre de 2024

Cosas de adultos

    El joven Antonio, apodado por todos como "Toni" era un chiquillo como cualquier otro con una gran admiración a su asombroso hermano mayor David. David era extraordinario en la escuela, en los deportes, además de ser guapo y por sobre todas las cosas, muy buen hermano mayor, pasando su tiempo libre con su hermanito Toni con quien jugaba videojuegos, practicaba algún deporte, veían alguna película animada o simplemente estaban juntos para divertirse y pasar el rato.
    Desafortunadamente para Toni la vida que conocía y disfrutaba a lado de su hermano mayor estaba por cambiar sin poder hacer nada al respecto, puesto que un buen día su hermano mayor le presentó a Tanya, su nueva novia y con quien ahora debía compartir, o competir, la atención de David.
    Toni no le prestó atención al comienzo, después de todo Tanya solo era como una amiga de su hermano o algo así. No debería haber problema, no había forma alguna de que la relación entre los hermanos cambiará, la novia solo era algo temporal, o eso es lo que intentaba creer Toni para negar los evidentes cambios que había entre él y su hermano mayor.
    Las divertidas películas de héroes y de acción fueron convertidas en películas tontas y aburridas de amor, practicar futbol o jugar a ser luchadores quedó de lado por ser "muy duro" según Tanya, y las pijamadas donde los hermanos jugaban videojuegos hasta caer dormidos, habían desaparecido por completo ya que David hacía pijamadas con su novia Tanya. Aunque no le gustaba la idea de estar con Tanya, Toni intentó unirse más de una vez a las pijamadas en casa de Tanya o alguna salida de David y su novia, algo que su hermano mayor le negó en cada ocasión por ser "cosas de adultos", y que él al ser un niño, no podía estar siempre con la amorosa pareja.
    Cansado de que su hermano mayor lo hiciera de lado durante meses en favor de su novia, Toni tomó la decisión de recuperar a su hermano David a cualquier costo, y como por obra del destino, algo muy interesante apareció en el momento adecuado.
    Mientras el niño usaba su navegador para investigar "como ser adulto", las búsquedas cambiaban poco a poco, las palabras clave se modificaban y pasando de página en página, el niño llegó a un sitio web muy interesante que podía resolver sus problemas al darle el cuerpo de un adulto con solo recitar un hechizo.
    La idea de Toni era clara: recitar aquel hechizo para tomar el cuerpo de Tanya y así pasar más tiempo con su hermano David tal como hacían antes de que ella llegará a sus vidas. A Toni no le gustaba mucho la idea de ser una niña, pero si debía ser una niña para volver a pasar el rato con su hermano mayor, era un precio más que justo para pagar. Especialmente porque en esa misma noche David y Tanya estaban teniendo una pijamada de adultos haciendo cosas de adultos que nunca quería contarle a Toni, por lo que si cambiaba de cuerpos en esos momentos, finalmente podría pasar más tiempo con su hermano y descubrir a que juegan en una pijamada de adultos.
    Con eso en mente, Toni empezó a recitar el hechizo, mismo hechizo que no estaba escrito en una lengua que él pudiera comprender, por lo que el niño hacía su mejor intento para recitarlo a la perfección y disfrutar del resultado.
    Como era de esperarse para todos, menos para Toni, su pronunciación del hechizo fue pésima, diciendo cosas sin sentido, cambiando las palabras y tartamudeando de vez en cuando, por lo que en consecuencia de su recital de hechizo alterado, hubo un efecto de hechizo alterado.
    En cuanto terminó de decir su hechizo fallido, todo se puso oscuro un momento, y después esa oscuridad solo fue levemente iluminada por la tenue luz roja de la habitación con música de fondo en donde ahora estaba Toni.
    El hechizo de Toni había funcionado, pero no como él quería, y lejos de estar en el cuerpo de Tanya para estar con su hermano David, Toni estaba en el cuerpo de David, quien con dureza estaba haciendo "una cosa de adultos" donde la chica desnuda e inmóvil era embestida de forma apasionada por su novio encima de ella.
    Toni no entendía muy bien lo que sucedía, pero le gustaba, se sentía muy bien, era intenso y emocionante, por lo que no buscó alguna respuesta de Tanya ni de nadie y de forma intensa siguió embistiendo a la chica que ni siquiera podía hablar por el placer que sentía y el collar en su cuello que demostraba a Tanya y a David, quien estaba al mando de la situación. Por si el placer que sentía Toni al estar en el cuerpo de su hermano mayor fuera poca cosa, dominar y castigar de esa manera a Tanya lo emocionaba un montón, en su mente eso era lo que ella se merecía por alejar a Toni de su hermano mayor, y ahora que esta atada de pies y manos en el sofá y con un collar en el cuello, el hermano menor estaba disfrutando de darle una lección inolvidable a la chica para que no volviera a acaparar a David.
    Por desgracia para los hermanos, Tanya no estaba en su cuerpo, y así como Toni terminó en el cuerpo de David, David terminó atrapado en el cuerpo de su novia Tanya.
    El hermano mayor no entendía nada, recordaba haber dejado a Toni en casa con sus padres, luego fue por su novia, entraron al motel y comenzaron con sus "cosas de adultos" tan rápidos, duros e intensos como era costumbre en sus "pijamadas de adultos".
    David ya había atado a Tanya al sofá, le había puesto su correa, la había provocado con algunas nalgadas, y justo en el momento que la verdadera e intensa emoción comenzó, todo se volvió negro para él, sintiendo una oleada de dolor y placer que no lo dejaba pensar con claridad. 
    David intentó ponerse de pie pero no pudo por las ataduras en sus extremidad, y aunque intentó hablar, el placer que sentía su cuerpo no le dejaba pensar en palabra alguna para que ese momento se detuviera, el chico fue sometido a tanto placer de forma inmediata que su cabeza no podía procesarlo todo, sucumbiendo a disfrutar el momento y a suplicar por más de eso con sus movimientos, levantando las caderas firmemente y rogando de forma desesperada porque su antiguo cuerpo le diera más duro.
    Con su cuerpo inmóvil, sin ser capaz de decir palabra alguna, con un collar apretando su garganta y con su trasero siendo embestido de forma cada vez más rápida, David solo pudo empezar a gemir y hundir la cabeza en el sofá sin importarle que su propio y antiguo cuerpo fuera aquel que le dominará y demostrará como se siente una mujer sumisa dentro de la cama.
    Así, con Toni castigando de forma implacable a la novia de su hermano mayor, David dentro del cuerpo de su novia disfrutaba de manera adictiva el placer que ese momento le brindaba, rindiéndose de forma sumisa al placer de las "cosas adultas" como toda una chica y deseando que continuará la "pijamada" por toda la noche, sin saber que la persona dentro de su verdadero cuerpo que le otorga ese momento de placer es su propio hermano menor. De esa manera, y después de varias semanas, finalmente los hermanos tienen una pijamada y un momento juntos otra vez, forjando un recuerdo inolvidable para ambos, mientras que la Tanya verdadera está sin entender nada, al de repente verse en el cuerpo del hermano menor de su novio y perderse toda la diversión.
Créditos a quien correspondan.

martes, 24 de septiembre de 2024

Mi viaje a escondidas

    Hola a todos.
    Descubrí está página hace unas pocas semanas y pensé que sería buena idea compartir mi historia con desconocidos de internet, y con algo de suerte, saber su opinión.
    Por cuestiones obvias prefiero mantenerme en el anonimato, pero pueden llamarme Rosa, y todos los nombre que voy a utilizar son ficticios. Dicho eso, puedo comenzar.
    Hace unos días decidí irme de vacaciones a la playa, una escapada rápida de fin de semana sin decirle nada a nadie, y regresar como si nada hubiera pasado. No era la primera vez que lo hacía, de hecho una parte muy emocionante de esos viajes sorpresa era desaparecer por completo sin que familia, amigos o gente del trabajo pudiera contactarme. Es una experiencia que hasta hace poco yo mismo hubiera recomendado encarecidamente, pero después de los problemas que viví en está última escapada creo que sería bueno pensarlo dos veces antes de hacer algo tan impulsivo. Más tarde llegaré a eso.
    El viernes por la tarde en cuanto salí del trabajo, ya tenía listas mis maletas en el auto y conduje por unas horas hasta llegar a la playa, registrándome en el primer hotel que llamó mi atención para pasar la noche ahí por un par de días.
    El sábado salí desde temprano a la playa, hice un poco de buceo y rente una tabla de surf para pasar el rato, luego comí el pescado frito más grande que pude pagar junto a un coctel de camarones que estuvo delicioso, casi tan bueno como la cerveza fría que pude disfrutar.
    Sin temor a equivocarme, mi viaje estaba siendo una maravilla, volviéndose todavía mejor cuando la linda mesera del restaurante donde almorcé, comenzó a coquetear conmigo y a preguntar si me gustaría dar una vuelta con ella cuando terminará su turno. Encantado acepté su invitación, por lo que me quede un rato más en el restaurante esperando a que la chica terminará de trabajar, con ella dándome un poco más de comida y bebida gratis como muestra de su interés y agradecimiento por esperar a que finalizará su turno.
    Espere poco más de una hora por ella, y aunque la espera era larga, bastaba con mirar a la chica para hacerme sentir que la espera valdría totalmente la pena; ella era una chica alta con la piel bronceada y abrillantada por el sudor, con el cabello oscuro atado en una coleta larga que llegaba hasta su cintura, y bajo el delantal que tenía puesto, solo llevaba un bikini negro y ajustado que se le veía espectacular; no bromeó al decir que esa chica estaba en otra liga, por lo que bastaba con mirarla para esperar todo el tiempo que fuera necesario en estar a su lado.
    A la chica vamos a llamarla "Amanda", ¿De acuerdo?
    Cuando Amanda terminó su turno fue por mi a la mesa donde la esperaba y pasamos el rato por la playa; pude abrazarla, cargarla, hasta me dejó ponerle bronceador por cada parte de su cuerpo, y la emoción que sentí cuando mis dedos recorrían su tersa piel, casi hacen que valga la pena todo lo que pase después de conocerla.
    ¿Han escuchado la frase "es demasiado bueno para ser verdad"? Bueno, muy tarde me di cuenta que Amanda era demasiado buena para ser verdad, pues todo ese carisma, belleza, sensualidad y lo que parecería una noche apasionado en su compañía, no era más que una mentira en la que había caído por completo.
    El asombroso día que había pasado con Amanda estaba a punto de terminar, con nosotros dos viendo la puesta del sol a la orilla de la playa y con ella agradeciéndome por pasar un día tan lindo con ella, juraba que no se había divertido así en años, y eso me hizo sentir muy especial. Me sentí lo suficientemente especial y valiente como para preguntarle a Amanda si le gustaría pasar la noche conmigo en donde me hospedaba. Ella parecía dudar de aceptar mi propuesta, pero después de insistir por varios minutos, ella me dio un beso en los labios y tomó mi mano para ir a descansar.
    Por desgracia, ese beso es lo último que puedo recordar antes de que todo se volviera borroso. No tengo idea de como llegué a mi habitación del hotel, ni tengo idea de donde están la mayoría de mis pertenencias de chico, y tampoco tengo idea de donde se habrá metido Amanda. Sin embargo, lo que menos entiendo de la situación es ¿Por que desperté viéndome como una chica?
    Esta mañana de domingo desperté solo en la habitación del hotel, completamente desnudo y con un aspecto tan drástico en mi imagen que hasta pensé seguía soñando. Pellizque mis mejillas, y hasta me di algunas bofetadas intentando despertar, pero solo conseguí estar adolorida de la cara mientras veía mi nuevo reflejo frente al espejo.
    Mi cabello era largo y azul, mi estatura había cambiado de forma exagerada, creo que perdí al menos 30 centímetros en comparación a cuando era un chico, y ya ni hablemos que los músculos que había trabajado por tanto tiempo en el gimnasio y que había desaparecido para ser reemplazados por un cuerpo delgado. No sé si sea algo bueno o malo, pero ni siquiera tengo pechos grandes o un buen trasero, Amanda estaba mucho mejor de como yo me veo siendo mujer, por lo que verme tan pequeña y poco femenina no me emociona en nada, solo me hacía sentir peor.
    Como no podía quedarme en shock y desnudo para siempre, busque entre mis maletas algo de ropa pero toda había desaparecido junto a una buena parte de mi dinero, tenía el dinero necesario para volver a casa, pero no volvería a casa luciendo como una chica.
    Sin más remedio tuve que ponerme la única ropa que encontré en las maletas; un bikini azul marino pequeño y que se ajusta a mi cuerpo; el bikini se parecía mucho al que usaba Amanda, solo que en mi cuerpo no había grandes rasgos femeninos que pudiera destacar; era vergonzoso utilizarlo, me sentía expuesto y femenino; apenas mirarme al espejo tenía ganas de quitármelo, pero si quería encontrar a Amanda o averiguar como volver a la normalidad, necesitaba un poco de ropa, y este traje de baño era toda la ropa que me podía permitir en estos momentos.
    Tal vez es un poco idiota de mi parte agregar una foto mía a la publicación, pero me interesa proteger mi vida como chico, no mi identidad como Rosa, así que les comparto esta foto que me tomé hace poco para demostrarles que mi cambió físico es autentico. Además estoy dispuesta a responder a sus preguntas para demostrar que digo la verdad, y con algo de suerte, recibir su ayuda.
    En estos momentos es domingo por la mañana, y tengo el resto del día para solucionar que le pasó a mi cuerpo antes de tener que regresar a casa viéndome de esta forma.
    Por ahora tengo unas horas más para estar en el hotel. No sé si pagar una noche más de estadía o guardar ese dinero que podría ser muy útil para pasar el resto del día por la playa en búsqueda de Amanda.
    Pienso que Amanda puede estar relacionada con esto, o hasta podría ser la responsable de mi situación, por lo que he pensado visitar el restaurante de ayer para confrontarla. Me preocupa un poco mi interacción con ella: si ella me hizo esto, dudo mucho que le interese convertirme en chico nuevamente, pero si ella no lo hizo, quizás se asuste cuando "una chica" entre al restaurante diciendo que en realidad era el hombre con quien ayer pasó la noche.
    Mi cabeza está llena de escenarios, cada uno peor que el anterior, y que me impiden tomar una buena decisión sobre como actuar para resolver mi problema.
    Así que, desconocidos de internet, me gustaría saber su opinión y si tienen alguna idea o consejo para solucionar este problema cuanto antes, después de todo solo dispongo de algunas horas más antes de estar en serios problemas. 
    Apreciaría mucho tener una segunda opinión de su parte para saber que debería hacer desde este punto, uno de los más complicados que he tenido que experimentar en toda mi vida.
    Estaré al pendiente de sus comentarios, y por favor, no se burlen de mi aspecto. Ya me siento lo suficientemente humillado y avergonzado viéndome como una chica promedio como para que los demás me lo recuerden. Les juro que a pesar de mi aspecto soy hombre, y me gustaría regresar a mi antiguo aspecto para terminar con estas vacaciones.
    Publicado por: RosaDeCorazones001.