martes, 25 de marzo de 2025

Como si fuera su esposa

    Entonces será de esta forma, por lo que queda del día tengo que actuar como si fuera su esposa para no meternos en problemas, después de todo, nos tacharan de locos o algo por el estilo si decimos la verdad.
    Mi mejor amiga y yo nos conocemos de toda la vida, fuimos vecinos desde pequeños, crecimos juntos y aun cuando cada uno se casó y formó su vida con su respectiva pareja, ambos mantuvimos el contacto. Era tal nuestra amistad que más de una vez se pensó que teníamos una aventura, cosa que nunca ha sido verdad porque cuando de amor se trata ella y yo sin duda nos amamos, pero no podemos decir de una manera romántica y ya ni hablar de tener una genuina aventura amorosa. Más bien, mi mejor amiga y yo lo que intentamos tener al menos una vez por mes, es alguna buena historia o alguna idea loca que queramos probar juntos, esas son nuestras aventuras.
    Para está ocasión, escuchamos sobre unas raras pastillas que intercambian el cuerpo de las personas que las consumen por algunas horas, y tras planearlo algunos días, decidimos intentarlo en su casa para tener una nueva perspectiva sobre nosotros mismos y nuestra amistad de muchos años.
    Las pastillas funcionaron de maravilla, veía mi propio cuerpo junto a mi, sentía la altura que me daban los tacones junto a lo pegado que se volvía el vestido en mi cuerpo, era un poco raro pero estaba siendo divertido, dándonos instrucciones mutuas sobre cómo ayudarnos en los cuerpos ajenos para actuar como lo haría el verdadero dueño del cuerpo, y por supuesto, conocer un poco más de como se siente tener un cuerpo del sexo opuesto.
    Estábamos por pensar que es lo siguiente que podíamos hacer o donde podríamos salir a divertirnos cuando la puerta se abrió y el esposo de mi amiga llegó a su casa, nos sorprendió bastante pues solía llegar más tarde, pero justo hoy decidió salí temprano del trabajo para sorprender a su mujer.
    Eso complicó las cosas tanto para ella como para mi, pues aún si se quedaba mi "mejor amigo" un rato más en casa, tendría que irse en algún momento y me dejaría a solas con su esposo. Con eso en mente, vimos una película y matamos todo el tiempo que pudimos, pero cada uno seguía en el cuerpo del otro, suplicando en silencio por volver a la normalidad antes de que el esposo de mi amiga se diera cuenta de nuestro intercambio.
    Por desgracia seguimos conversando, pasando el rato, cenamos, y finalmente "mi mejor amigo" tuvo que decir adiós para ir a casa a ver a "su propia esposa", dejándome a mi solo y atrapado en su cuerpo femenino para pasar el rato "con mi marido".
    Tenía muchas emociones encontradas para ese momento. Por el lado amable, mi amiga y yo nos conocemos tan bien y tuvimos unos últimos consejos que no tengo dudas de que ella podría actuar justo como yo lo hago para que mi esposa no sospeche del intercambio, de igual manera yo me siento lista para estar en sus tacones y que el marido de ella no descubra quien soy yo realmente. Sin embargo, poder fingir ser mujer, o ser mi mejor amiga, no sería tan cómodo, mucho menos estando a solas con su pareja, y apuesto a que mi amiga se siente de la misma manera al dejarla atrapada dentro de mi cuerpo y con la compañía de mi esposa.
    De solo pensarlo la cabeza me da vueltas, ahora sí nos metimos en un serio problema para el cual no encuentro una buena solución; si nuestras parejas descubren que mi amiga y yo cambiamos de cuerpos nos dejarán de inmediato, o quizás piensen que estamos locos, o una vez más la idea de la aventura sentimental estará sobre la mesa; entre más lo pienso, peores escenarios vienen a mi cabeza, donde la única "solución" posible que encuentro es fingir que soy ella y que ella finja ser yo hasta que cada uno vuelva a su respectivo cuerpo sin que nuestras parejas se den cuenta.
    Todavía faltan algunas horas para que volvamos a la normalidad, y tal como estoy haciendo, debo seguir dando lo mejor de mi para tomar el puesto de mi amiga con su marido, y aunque estoy evitando algunos escenarios, dadas las horas es cuestión de tiempo para que "mi esposo" me pida unirme a la cama con él, y eso si de verdad quiere dormir, en serio que solo sea para dormir. Hace poco pensé en bañarme para quemar tiempo pero él intento unirse, por lo que tuve que usar una mala excusa para evitarlo, algo que por su expresión no lo dejó muy contento, supongo que la idea de llegar a casa temprano para estar con tu esposa y que esta te rechace no es bonita, ¿Cierto? Sin embargo, lo tengo que hacer porque yo no soy su esposa, solo tomé prestado su cuerpo por algunas horas y ese es un secreto que mi amiga y yo nos llevaremos a la tumba.
    Se me acaban las excusas, pero si resisto un poco más actuando como lo haría mi amiga, será cuestión de tiempo para volver a la normalidad... pero si las cosas no funcionan, y no logró volver a la normalidad a tiempo, temo que no tendré de otra más que asumir por completo el papel de esposa para no arruinar la vida de mi amiga... así que si no regreso a mi cuerpo a tiempo, no tendré más remedio que ser toda una buena esposa para mi marido con tal de salvar a mi amiga y nuestro valioso secreto.
Créditos a quien correspondan.

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