-¿Eh? ¿Pero que me ha pasado? Yo no me he ido a dormir así-
Me preguntaba a mí mismo recién salir de la cama, viendo como mi cuerpo era diferente; el de una cría con grandes pechos en ropa interior amarilla, muy linda a decir verdad, y con unas calcetas blancas hasta los muslos que no dejaban nada que desear o comparar con alguien mayor.
-¿Esto es real? Se siente muy real...-
Hablaba para mí mismo mientras tocaba este cuerpo, sus carnosos muslos, su abdomen plano, sus nada despreciables pechos a través del sostén y terminando con el suave rostro, pellizcando una de sus mejillas con fuerzas como para asegurarme que no estaba soñando, sintiendo un leve dolor pero pada similar a la sensación de despertar.
-Eso es ¿y si todo fue un sueño?-
Hasta ahora, las emociones no me habían dejado pensar un poco o recordar algo, pero decir "sueño" fue como un detonante para recordar lo que había soñado antes de despertar.
Soñé que era un chico...desde ahí fue extraño...pero hice poco más que vivir mi vida normal, era casi todo igual a como ahora, lo único que cambiaba era que ahí era hombre y también hubo una persona, no recuerdo bien en que momento apareció pero recuerdo su singular sonrisa, por alguna razón daba confianza y su cabello rosado era hermoso aunque nunca en toda mi vida he visto una persona así.
-Pero sólo fue un sueño-
Me dije a mí misma, pensativa y viendo mi cuerpo, era tan extraño porque se sentía demasiado real lo que había soñado, incluso algunas partes del sueño se sienten nostálgicas y con mucho sentimiento pero venga, no hay forma de que fuera así: mi cuarto esta un poquito desordenado pero mucho mejor que el de mi versión masculina, todas las fotos que tengo en mi cuarto soy yo como una chica con mis amigas o familia, mi armario está lleno de bragas, bras, vestidos y un largo etcétera de ropa para chica, tengo hasta una cabecera que dice "Maribel" mi nombre que he tenido toda la vida.
-Aunque aun no tengo idea de quien sea esa chica-
Por más que intenté recordar si alguna vez la vi no lo logré, incluso entre más lo pensaba solo podía recordar su sonrisa y su cabello rosa, pensar en ello sólo me hizo empezar a jugar con mi cabello para peinarlo sin llegar a una respuesta en verdad.
-Bueno, quizás ella fue una visión a futuro, recuerdo haber leído que eso pasa algunas ocasiones, como una premonición o algo así-
Me dije a mí misma mucho más tranquila y sonriente, solo fue un mal despertar así que mejor no perder más el tiempo con eso, tenía que apurarme si quería llegar a clases de la mejor forma aunque ahora debía de planchar mi ropa. No recordaba haberla dejado en la cama y cuando me levante hice un caos; tire la blusa de un lado, la falda y moño de otro, las pantimedias estaban en mis piernas, hasta mi conjunto de ropa interior favorito se había caído, aunque al menos seguía junto.
Mi día sin duda no había empezado como quería pero no importa, tomando mi ropa interior me fui a la ducha, estaba segura de que un buen baño me despejaría la mente y me dejaría lista para seguir mi hermosa vida de estudiante, aunque estoy segura que si me encuentro algún día a esa pelirosa, le preguntaré si conoce a Mario mi nombre de chico dentro del sueño.
genial! nunca defraudas aunque nos dejaste solos mucho tiempo, espero vuelvas a subir seguido este tipo de historias.
ResponderBorrarsigue así!
Muchas gracias, Fuego, me alegra estar de vuelta tras tanto tiempo y aún me alegra más saber que les gusta lo que escribo, cuenta con que haré más historias así (Este concepto ha sido de mis favoritos hasta la fecha), de conceptos que ya hay e incluso algunos nuevos.
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