martes, 7 de marzo de 2023

La mejor capacitada

Mi familia es dueña de una grandiosa empresa que gana montones de dinero anualmente por todo lo que vende en todas partes del mundo.
Yo desde que tengo memoria me la pasé estudiando para que un día la empresa fuera mía, sabía todo lo que necesitaba para manejar el negocio pero nunca imaginé que mi abuelo y dueño de la empresa, no buscará al más capacitado. 
En vez de elegirme a mí, que me había preparado toda la vida para ese puesto, mi a abuelo escogió a mi prima, una chica tonta y superficial que jamás se había preocupado por la empresa. Quise dialogar con mi abuelo, diciendo que no había tomado la decisión correcta pero él solo decía que no se equivocaba y que mi prima era la mejor capacitada para el puesto, dando por terminado el asunto.
Aún así, yo no aceptaría tal decisión y por fortuna mi prima tampoco, ella misma me busco a solas para hablar y ahí admitió que no tenía idea de lo que haría, pues estaba segura que yo heredaría la empresa y que por más que trató no fue capaz de convencer al abuelo de dármela a mí. Sin embargo, lo más importante de esa conversación a escondidas, fue que no todo estaba perdido según ella, sacando de su bolsa un par de pastillas. Me explicó que fue difícil conseguir las pero esas eran unas pastillas capaz de hacer que cambiemos de cuerpo el uno con el otro para siempre, ella sabía lo que significaba, perdería su cuerpo y su vida pero estaba dispuesta a hacerlo para dejarme la empresa y que pudiera tener una vida dentro de mi cuerpo.
La propuesta sonaba de locos pero ambos estábamos bien determinados a hacer lo que queríamos por lo que acepte su propuesta. 
Ella me dio una de las pastillas y me dijo a qué hora tomarla, que está charla nunca había sucedido y que la próxima vez que nos viéramos ella sería Felipe y yo su prima Alicia y lo que cada uno hiciera con su vida no será asunto del otro.
Llegada la hora en mi habitación tome la pastilla, sintiendo un fuerte mareo y muchas luces de colores invadieron mi visión por largos minutos hasta que los efectos fueron disminuyendo para notar el cambio.
Estaba en mi nuevo cuarto, violeta y con un gran espacio, lleno de ropa, maquillaje y mucho más.
Yo ahora era mucho más pequeño y con cabello plateado, llevaba una falda pegada, blusa y saco que rápidamente me quité, descubriendo así que lo que no creció en altura mi prima lo había hecho en otras partes de su cuerpo.
-Oh, prima sí que habías crecido, quien diría que siendo tan pequeña tendrás unos pechos tan grandes ¿cómo de talla D? Puede que más, aunque debería decir que ahora son míos-
Pregunté para mí mismo mientras empezaba a tocar mis pechos y jugar con el sostén negro que llevaba para moverlos, teniendo en mi rostro una expresión total de lujuria al pensar en que ahora era una mujer con enormes atributos.
Abajo tampoco estaba mal, tenía una tanga negra que resaltaba sus caderas y trasero como toda una mujer, por lo que fue imposible no pasar la mano por unos segundos antes de volverla a subir.
-Ahora lo entiendo jajaja, el abuelo tenía razón, en conocimientos yo soy el más preparado pero mi prima, con este cuerpo era la mejor capacitada, no hubiera visto un hombre que se le resistiera a sus encantos, ni yo mismo lo estoy haciendo, soy irresistible-
Eso me hizo pensar bastante, mi abuelo la iba usar como una muñeca para pactar los negocios o cosas así y dejar a alguien más para los papeleos pero ahora yo soy el paquete completo: tengo el cuerpo de una diosa y el conocimiento para lograr lo que quiera, solo espero no tener que usarme como el abuelo quería con Alicia, ya que por muy mal que suene, solo yo quiero sacarle provecho a mí nuevo cuerpo.
-Aunque ahora yo soy Alicia y puedo hacer lo que quiera jajaja... veamos lo primero será comprar mejor ropa, algo no tan atrevido como lo que la vieja Alicia ocupaba pero también debo tener algo para los clientes complicados, de paso podría comprarme ropa interior...pero eso será otro día, por hoy tengo que aprender lo que esté cuerpo necesita, empezando por quitarme el calor que he sentido todo el tiempo-
Claro que lo hacía por el bien de la empresa, después de todo tenía que conocer a fondo este cuerpo para poder manejarlo muy bien a solas y frente a los empresarios si alguna vez llegaba a ser necesario.
Por ahora empezaría con algo fácil como fotos, sacándome toda la ropa para ver mi nuevo cuerpo y aprender cómo se siente, solo así seré la mejor capacitada.
Créditos en la imagen

2 comentarios: