-Un poco de brillo en los labios, quizás más labial mejor, oh y con un poco de sombras quedaría mejor, y estoy segura que con un rubor quedaré aún mejor, lo sé, sin dudar seré la mejor, más linda y más sexy madre de lo que mamá nunca fue-
Me dije sonriendo, dando unos saltitos y aplausos por la emoción de mi idea antes de volver a concentrarme en mi maquillaje delante del espejo con el que me vería sensacional como toda una Diosa que soy, porque simplemente siento y creo que nadie me puede igualar con lo linda, sexy, madura y bien proporcionada que estoy de todos lados, incluso con esta linda ropa interior me va mejor; su color durazno como mi piel da un poco la ilusión de que voy desnuda ignorando los bordados, sin mencionar que es tan apretada que levanta mi busto y trasero un poco más para presumirlos, no hay como pueda mejorar, sencillamente tomar el cuerpo de mamá para hacerlo mío es lo mejor que pude haber hecho en toda mi vida.
Mamá se divorció de papá hace muchos años y yo me fui con papá sin tener elección, visitando de vez en cuando a mamá pero siempre quedando sin palabras por su condición. Y no me refiero a que su salud fuera mala, es increíble para su edad, tiene más de 40 años y parece toda una jovencita hermosa y esculpida por los dioses, más de un hombre desearía estar con ella pero ni mi propio padre puede decir que tiene ese logró.
Cuando era un par de años más joven pensé que mamá se fue para disfrutar de una vida como soltera haciendo lo que le plazca, actuando justo como se comportaría una abuela en la casa cuando fuera a visitarla para no levantar sospechas de una vida secreta y asombrosa.
Sin embargo no es así, genuinamente ella vivía como una abuela: no salía a fiestas, ni tenía aventuras de una noche ni con hombres ni mujeres, no tomaba, no fumaba, menos se drogaba. Su día a día era aburrido como pocos: trabajar, llegar a casa, ver una película mientras tejía o jugaba en su celular, prepara la cena o pedir comida rápida e irse a la cama para repetir el proceso una y otra vez sin descanso o algo de variedad.
Yo siempre creí que era muy linda, que es muy linda más bien y que era un desperdicio estar así sin mencionar que físicamente quería ser como ella, con el tiempo me di cuenta que deseaba desde lo profundo de mi corazón no sólo ser como ella, literalmente quería ser ella y llevar su vida, con unos cambios cabe mencionar.
Y un día mi sueño se hizo realidad, recuerdo estar en mi cuerpo y despedirme mientras ella sonreía desde la puerta de su hogar pero en un abrir y cerrar de ojos, yo estaba dentro de la casa de nuevo sin entender como sucedió, descubriendo con mucha emoción el cambio que me pasó.
Finalmente estaba en su cuerpo de alguna forma milagrosa y aunque quería gritar y celebrar, me contuve para llamarme a mi mismo, o mejor dicho a mi cuerpo en el cual me respondí, es decir no parecía que era mamá, habló justo como yo lo haría diciendo que iba a mitad del camino con su padre y que si yo había olvidado algo o porque la llamada, a lo que de inmediato dije "No es nada, solo quería decir que te quiero" para colgar el teléfono y celebrar lo acontecido.
No entiendo muy bien que pasó pero yo cambie de cuerpo con mi madre, pero mi cuerpo de adolescentes sigue exactamente igual, así que sin mamá para reclamar su cuerpo, con todo el gusto y felicidad del mundo acepte el vivir su vida como tanto quería.
Muchas cosas ya la sabía como su nombre, edad, profesión, quien era su ex marido, como era su hijo y un sin fin de etcéteras sobre esta Diosa encarnada como mujer.
A nivel social no cambió nada, aprendí a llevarme bien con mi jefe y compañeros de trabajo, incluso me acostumbre a los coqueteos de los chicos y empecé a salir a cenar o a las casas de mis compañeras y ahora amigas, en cuestión de unos meses le di vida a su aburrida vida social pero lo mejor estaba por comenzar.
Vivo sola en un enorme departamento sin nadie que me pueda molestar o yo a ellos, y es que la privacidad de mi hogar es sin duda lo que más disfrutó hasta la fecha. Puedo andar semi desnuda como ahora, me encanta sentirme tan linda y tan sexy con todos los conjuntos nocturnos o de ropa interior que mamá utilizó y que ahora son de mi pertenencia, pero no solo me gusta la ropa interior, soy muy feliz yendo de compras y probándome todo tipo de ropa delante del espejo jugando a que soy una modelo, lo cual puede no estar muy alejado de la realidad.
Hace unos meses conocí a una fotógrafa muy hermosa que me pidió sirviera de modelo en su sesión, yo le dije que no tenía experiencia previa pero ella insistió y nuestra sesión fue todo un éxito, nunca me había sentido tan viva y tan como una mujer, decía que mis poses eran bellas y naturales además que sería un éxito en el modelaje al igual que su revista, cosa que fue verdad.
Su revista salió finalmente hace unas semanas y en tiempo récord se agotó lo que me hizo recibir una fuerte suma de dinero y un montón de oportunidades para explorar el mundo del modelaje.
Justo hoy tengo una importante audición así que me he esforzado un montón en verme lo más bella que pueda; la ropa interior es de diseñador y fue la misma que use en unas fotos de mi primer sesión, el maquillaje es importado así que trato de usarlo a la perfección, tengo listos unos tacones altos deslumbrantes y por último un vestido azul corto que no solo es bello sino que también es mi favorito, haciéndome sentir segura de que mi audición saldrá a la perfección, solo debo dar lo mejor y demostrar todo lo glamurosa y fabulosa que era mi madre pero que yo voy a explotar para volverme la mujer que siempre quise ser.
Me gusto la historia
ResponderBorrarUn poco, bastante tarde, para responderle pero me alegra que le gustara.
Borrar-Nero.