sábado, 11 de febrero de 2023

La travesura de Alexa 4

En ese momento tuve que dejar de mirar y esconderme, pues tal como dijo, Esmeralda parecía haberme visto.
No tuve de otra más que irme a esconder, escuchando un poco de su conversación.
-Debes estar desesperada, Esmeralda. Aquí no hay nadie más pero si gustan, diviértanse un momento entre ustedes chicas, en lo que voy a investigar-
-Pero....-
Ambas mujeres quisieron protestar pero fueron fácilmente calladas por mi cuerpo masculino, el cual oía caminar justo en mi dirección; supongo que así como yo reconocía mis propios pasos, ella hacía lo mismo con los suyos, arrinconándome en una habitación y luego otra hasta el baño del cual no pude escapar.
Quedar atrapada era una mala jugada pero todo en estos momentos parecía ser malo, si escapaba Alexa estaría alerta de mí o incluso podría enviar a su madre, mi madre por ahora, a buscarme y castigarme. Otra mala opción era ir debajo del sofá de nuevo, pero ir ahí implicaba que si me atrapaba, también perdería todo mi progreso para el hechizo. Sí, ser arrinconada en el baño es malo, pero podría ser peor.
-Aléjate de mi, Alexa. Basta de juegos, dame los objetos para volver a la normalidad-
Aunque intentaba mostrarme dominante, fui retrocediendo y haciéndome más pequeña a cada paso que Alexa en mi cuerpo daba, hasta que termine de rodillas ante ella, oyendo su respuesta con algo de temor.
-Si siendo una niña no obedecía, ¿Qué te hace creer que lo haré ahora? Ahora soy Harry Stronger, un adulto muy popular con las mujeres y muy fuerte, haré a todas las vecinas y mi familia felices, seré el hombre que tú nunca pudiste ser-
-P-pero yo soy un hombre...me veo como una niña porque tu robaste mi cuerpo pero soy todo un hombre-
-¿Un hombre que no cogía desde hace años?¿Que no tenía novia y tampoco prestaba atención a las mujeres del vecindario? Tan descuidado con las mujeres que simplemente ya ni te saludaban. Esmeralda, Helena, Camila, Rebeca y muchas mujeres más querían estar contigo, al menos tener algo de diversión, cosa que tú nunca les diste. Por eso te elegí a ti, todas las mujeres del vecindario agradecería que finalmente haya un hombre que las deje satisfechas, mientras que tú, que no servirte como hombre, quizás puedas servir como una niña y tener una nueva vida-
Las palabras de Alexa me herían profundamente, tenía ganas de llorar pero de hacerlo solo le daría aun más la razón, a una niña que a diferencia de mi, tiene a las mujeres haciendo fila y rogando por más, cuando yo en su lugar rogaba porque alguna de ellas algún día me hiciera caso. Puede ser que lo más duro de enfrentar para mí es que, esa oportunidad de una mujer rogando por mi siempre estuvo ahí, y no solo con una mujer, había un montón, pero nunca tuve lo necesario para aprovecharlo.
Dolía verlo de esa forma pero Alexa tenía algo de razón, y en tan poco tiempo, estaba haciendo un mejor trabajo que yo en años.
Aún así, no quería darme por vencido.
-Eso no es verdad...yo no soy una niña, soy un hombre y voy a recuperar mi cuerpo-
En ese momento Alexa se burló de mi, dando unos sarcásticos aplausos antes de hablar.
-Claro, un hombre con el cabello atado en colitas, con una mini falda y unas bragas de osito que puedo ver-
Cerré las piernas con vergüenza para que no pudiera ver mis bragas, haciéndome aún más pequeña mientras él más hablaba.
-Un hombre que pasó todo el día de ayer vestido de sirvienta haciendo tareas domésticas, ¿Crees que no me entere? Tu tía te tomó un montón de fotos mientras jugabas a la sirvienta y veías tus películas de princesa, esas fotos las envío a tu mamá diciendo que "Alexa finalmente se comportaba como una niña y que aprovechará que te iban a cuidar para que mamá viniera a jugar conmigo-
Créditos a quien correspondan.
Ahora que lo decía, tía Camila estuvo un montón de tiempo en el teléfono, y más de una vez la vi en el celular apuntando a mi dirección, ¿todas esas veces me estuvo fotografiando y se lo mostró a mamá? De ser así..... Todo lo que yo estaba haciendo para tomar el libro, sin saberlo fue aprovechado por mi tía, quien le contó a mamá y a su vez, le contó a Alexa en mi cuerpo, quien ahora usa esa información para humillarme aún más.
-Los adultos hacemos cosas de adultos y las niñas cosas de niñas, así que yo seguiré cogiendo con todo el vecindario mientras tu juegas a la sirvienta y a ser buena niña. Ahora que lo pienso, yo era la única niña del vecindario, da gracias a que en algunos meses habrá un montón de niños a quienes puedas cuidar, Alexa. Serás toda una hermana mayor-
Ella me decía mientras palmeaba mi cabeza tan como si solo fuera una inofensiva niña pequeña, algo que resultaba muy molesto y humillante pero a lo que no podía responder. 
-Basta ya, tú eres Alexa, yo soy Harry y te juro que volveré a ser un hombre-
Temblaba de miedo al decir eso, pensando en que en cualquier momento podría ser sometida por mí propio cuerpo para no hacer el ritual, manteniendo la guardia alta en espera de que esa caricia en mi cabeza se volviera un agarre o algo así. 
Y aunque la mirada de Alexa en mi cuerpo era de temer, mostró una sonrisa y me dio una llave que llevaba la forma de un corazón además de mostrar una pequeña caja de madera, ahí es donde guardaba el regalo de su madre. 
-En mi habitación, debajo de los peluches hay una caja de madera pintada de rosa, ahí están ambos objetos que necesitas para el ritual. Te dejaré irte para que intentes el ritual solo con una condición-
Fruncí el ceño ante tan sospechosa oferta, que estaba dispuesta a aceptar salvo una condición. 
-No soy tonta, no tendré sexo contigo ni nada parecido, solo así acepto-
Esa sonrisa en mi cuerpo cambio por una con malicia, tomando mi cabello a la fuerza y pasando en repetidas ocasiones mi propio y duro pene sobre mi rostro. 
-Para nada, hasta para mi sería raro tener sexo con mi antiguo cuerpo, o con una niña pero no habías dejado de mirar mi pene desde que llegué, además de que tus bragas están mojadas, considera esto una muestra de gratitud y de lo que podrás hacer con algún hombre una vez que crezcas-
Esas retorcidas palabras resonaban en mi cabeza mientras mi rostro era ensuciado por el pene que alguna vez tuve y que nunca había visto tan grande como ahora; no se si es por ser tan pequeña ahora o que en verdad mi cuerpo masculino esta excitado, pero esa cosa es enorme. Muy enorme. 
Tenía fluidos de mi cuerpo y del de mamá, seguro también habían fluidos de mi vecina, el pene se sentía tan duro y caliente, con un olor de lo más fuerte que se quedaba en mi rostro junto a la sensación pegajosa. Me gustaría quejarme o reclamar pero abrir la boca era una pésima idea, así que solo atiné a cerrar la boca y los ojos, mientras sentía como me ensuciaba, me despeinaba y hasta me tiraba los lentes, en un sucio acto que aún si duró unos cuantos segundos, los sentí tan largos como si fueran horas.
Créditos a quien correspondan.
El acto pervertido finalmente terminó pero sólo para dar inicio a otro, uno donde dejaba su miembro muy cerca de lo rostro, como una asquerosa pero tentadora opción que apenas y podía rechazar.
-Los objetos....los objetos....-
Decía sin poder dejar de ver con anhelo mi propio pene.
-¿Qué tienen los objetos?-
-Tú tienes uno...estás haciendo trampa...-
Alexa en mi cuerpo se echo a reír y saco de la caja de madera, el regalo de su madre, dejándome sin palabras y sin aliento para responder cuando puso las bragas de su madre en mi cabeza e hizo añicos la nota con su número.
-¡No! ¡El objeto!-
Mis esperanzas se habían ido con la nota hecha pedazos, o al menos eso creía, pues la humillación por parte de Alexa todavía no llegaba a su fin.
-Espera, espera, espera, ¿en serio no te diste cuenta? No, espera otra vez, ¿en serio te importaba más esa carta que la tanga? Eres un maldito bicho raro, pero sobre todo un tonto. Todo ese "regalo" no es de mamá, es mío-
Lo que dijo me dejó helada, no podía creerlo, no iba a creerlo, y se lo iba a demostrar teniendo valor por primera vez de hablar sin tartamudear.
-¡Eso no es cierto! Mamá dejó eso para mí hace tiempo-
-Bueno, eso es una verdad a medias, pequeña ilusa: mamá en verdad te dejó una nota pero hace tiempo la robé, la carta que acabo de romper yo la hice, soy muy buena falsificando la letra de mamá, ¿No lo crees?-
Lo decía con una sonrisa y alegría totalmente opuesto al miedo y desesperanza que yo sentía, estaba tan al límite de mis emociones que simplemente comencé a actuar y hablar sin pensar.
-No mientas, Alexa. Yo sé lo que pasó y tu madre dejó esa nota y sus bragas para mí-
Alexa rio aún más fuerte, se agachó para verme a la cara y acarició mi cabeza un par de veces más antes de decir. 
-Esa tanga es mía-
Dijo con la sonrisa más malvada y sádica que jamás pude ver.
-Sip, esa tanga es mía, tú prima Cinthya me descubrió usándola, tuve que esforzarme mucho para que no le contara a mamá, a cambio tendría que ser su sirvienta un día, algo en lo que tú ya me has ayudado. Gracias, Alexa-
Eso que decía, coincidía con lo que hable con Cinthya, y si todo lo que decía resultaba ser cierto, ¿hasta que punto está niña me ha tenido justo donde ha querido? De ser verdad, todo el tiempo he estado en la palma de su mano.
-Lo único que hacía falta, era deshacerme de esa evidencia por lo que tú amabilidad fue la oportunidad perfecta. Sí, mamá te dejó una notita pero yo falsifique esa nota hace poco y no lo notaste, entré con la misma llave que tú utilizaste y sobre la tanga, lamento decirte que no es del culo que imaginabas, pequeña~
Créditos a quien correspondan
No fue hasta que esta horrible niñita ladrona de cuerpos quedó satisfecha, dejó de jugar con mi cabeza y de humillarme, me entregó todo lo que hacía falta y hasta lo sobrante para el ritual, me puso los lentes, me levantó y me sacó de casa, me sacó de mi propia casa, dedicándome unas cuantas palabras. 
-Buena suerte, niñita. Hagas lo que hagas no vuelvas por aquí, no descansaré hasta que mami te tenga un hermanito-
Dicho eso me cerró la puerta tras lanzar mi bolso con el resto de mis cosas mientras yo me acomodaba los lentes y me quitaba la tanga de la cabeza. 
Me costaba asimilar todo lo que había pasado, necesitaba recapitularlo porque tantas cosas sucedieron en apenas unos minutos que no se si decir que mi misión de espía fue un éxito o un fracaso. 
Aún si perdí las llaves de mi casa tengo todo lo necesario para llevar a cabo el ritual; tengo el libro, tengo los objetos y no me he masturbado o tenido sexo...
-Pero algo esta mal-
Me decía al notar que mi joven y precoz cuerpo, todavía sentía escalofríos y placer por lo que vi ahí dentro. Intentaba ignorar esa sensación y corría para llegar lo más pronto posible a la casa Flower para hacer el ritual...pero...pero....
-No lo puedo olvidar-
Me bastaba con respirar para recordar de forma vivida todo lo que vi hace unos segundos...el cuerpo desnudo de mamá...ojala sea como ella cuando crezca...el cuerpo impaciente de mi vecina...ella se veía tan contenta...mi cuerpo desnudo dando placer como un semental...ojala que alguien me lo hiciera así...los recuerdos que la tanga de Alexa me daba...debería ser más como ella... 
-¿¡Pero en que estoy pensando!?-
Esto era malo, no paraba de recordar y disfrutar ese momento, mi cuerpo añoraba ese momento, mi entrepierna se estremecía de solo pensarlo al punto de encorvarme al andar y aunque en mis emociones dominaba el miedo, también la felicidad, la curiosidad, el deseo y el placer se hacían cada vez más presente. 
-Esa mocosa...¿Qué está tramando? Debo volver...No...eso no...-
Mi cuerpo y mente combatían una contra la otra más que nunca, mi cuerpo quería regresar pero mi mente sabia que si lo hacía, sería Alexa para siempre así que no. No. Yo me mantuve firme a mis deseos como Harry y no a los deseos de cuerpo de Alexa, y aunque el camino parecía infinito me las arregle para volver a casa. 
Debo volver a la normalidad. 
Debo volver a la normalidad. 
Debo volver a la normalidad. 
Repetía una y otra vez en mi cabeza mientras llegaba a mi afeminada habitación, ahí seguí las indicaciones de Alexa y encontré el lugar donde su objeto valioso se encontraba. Solo que dicho objeto, fuera cual fuera de la caja, me dejaba paralizada. 
-Vamos, vamos, vamos, vamos, sigue así, te lo ruego-
Una vez más, oía la voz de mamá gemir como loca mientras alguien tenía sexo con ella, ese alguien era mi cuerpo el cual aun era dominado por Alexa.
Créditos a quien correspondan.
En la caja había 3 objetos, el primero destacó por el ruido que hacía. 
Era un teléfono que mostraba en vivo mi casa, mi habitación y a mi cuerpo teniendo sexo con mamá. No importaba cuan duró fuera, mamá no dejaba de implorar por más. 
De hecho estoy casi segura de que mamá no sabe que la están grabando pero justo eso está haciendo Alexa, y tan perverso acto me es mostrado, aunque no se si es para hacerme dudar y masturbarme, o si lo hace para humillarme y demostrarme que ella si esta teniendo sexo con una mujer. 
-C-como sea...sea cual sea el caso...yo voy.....yo...-
Trataba de ignorar el video frente a mí, y sacaba el resto de cosas de la caja que eran igual de perversas que el video. 
-Es una niña...como hizo para obtener esto...-
Me decía con la cara completamente avergonzada cuando saqué un traje pervertido de látex y peor aun, un juguete para adultos...para mujeres...
Créditos a quien correspondan.
-Es....un dildo...-
Un dildo rosado, tan grande como mi mano y tan delicioso que de inmediato lo lleve a mis manos. 
-¡¡¡NO!!!-
En ese momento reaccione, ya estaba saboreando en mi boca aquel perverso juguete. Estaba excitada por lo que me hizo Alexa antes y oír a mamá gemir, solo me daban más ganas de hacerlo yo también. 
Ese video en vivo era buen materia....ese traje era tan sexy...el dildo...necesitaba tanto mi dildo pero ¿sacrificaría toda mi vida por algo de placer? ¿Estaba dispuesto a dejar todo atrás para volverme una niña pequeña? ¿O sería capaz de volver a la normalidad y sacar provecho de todo lo que hizo Alexa en mi cuerpo? 
-Yo...yo...-
No sabía que hacer. 
En una de mis manos sostenían aquel dildo enorme que deseaba dentro de mí, más que cualquier otra cosa. 
En mi otra mano, sujetaba mi bolso con todo lo necesario para el ritual y volver a la normalidad. 
Ambas opciones estaban en la palma de mi manos, y yo genuinamente no sabía a cual responder....
Los gemidos de mamá de fondo, los deseos del cuerpo de Alexa, mi mente masculina, mis deseos de recuperar mi vida, todo estaba en conflicto en ese momento hasta que llegó la resolución.
Mi decisión, mi deseo y mi vida será:


8 comentarios:

  1. Escribirás todos los finales o elegirás solo 1?

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Gracias por comentar, anónimo, y agradezco la pregunta. Obviamente escribiré todos los finales, espero que al menos uno de ellos sea de su agrado. Aunque si le gustan todos, nada mejor para mi.
      -Nero.

      Borrar
  2. La decisión es muy importante ahora pero algo me dice que no debería fiarse con que el ritual para volver es la solución estoy seguro que el nuevo Harry(Alexa) tiene algo guardado, es muy intrigante y muy bueno espero que podamos ver ambos desenlaces la historia.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. ¿Será o no será? Alexa parece que siempre tiene algo planeado, ¿también habrá pensado algo como lo que comentas? Supongo que en los próximos días se sabrá. Espero le guste, anónimo.
      -Nero.

      Borrar
  3. Espero que sera un final muy rico para todos de su version joven de la nueva alexa y una alexa mayor tambien con sus cosas muy ricas jajaja

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Hay muchas posibilidades y muchos caminos, espero que al menos uno terminé por ser de su agrado, anónimo.
      -Nero.

      Borrar
  4. que buena esta esta historia me encanta buen trabajo Nero

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, Drako. Se agradecen sus comentarios y apoyo, el desenlace está muy cerca de llegar, espero sea de su agrado.
      -Nero.

      Borrar