-No hay nadie más linda que yo~Que bonita soy~soy lo mejor de lo mejor~jajajaja-
Ahí iba caminando Liss, de forma tan confiada que rozaba en la arrogancia, andando con seguridad a quien sabe donde, ni ella sabía muy bien a qué sitio se dirigía pero quería salir y presumir a todo el mundo lo bonita que estaba ese día después de haber estado escondida durante tanto tiempo.
Su rojizo cabello atado en un cola de caballo con un listón blanco, un top hermoso color rosado con listones rojos y por debajo una blusa blanca delgada que no dejaba mucha de su blanca piel a la vista de las personas. En la cintura comenzaba una falda de cuadrícula roja con negro y unas medias hasta los muslos con unas zapatillas rosas deportivas. Su lindo e infantil aspecto junto a su llamativa personalidad sin dudar la ayudaban a destacar entre la multitud sin importar en qué lugar estuviera. Ella básicamente se estaba volviendo bastante popular por esas razones y que era raro verla por la ciudad, de repente aparecía por días u horas, armaba un buen espectáculo y desaparecía por un tiempo indefinido hasta volver a aparecer, su presencia se convirtió en una especie de buen augurio relacionado con la diversión encabezada por aquella alegre jovencita.
Si Liss pudiera le encantaría estar todos los días pasándola en grande con las personas que se encuentre en la ciudad, sin embargo sus repentinas desapariciones o tiempos de inactividad es porque sus padres y hermana están en la ciudad, lo que haría de su día uno muy problemático al encontrarla de esa manera haciendo un alboroto.
El viento soplo sin previo aviso e interrumpió sus pensamientos, sorprendiendo un poco a Liss quien volteo a los alrededores para ver si estaba o no sola. Nadie más que ella parecía estar usando la misma ruta, así que lejos de sostener su falda, la chica levantó sus brazos sin preocuparse, dejando que su ropa se moviera por el aire y dejará al descubierto su pequeño secreto atrapado dentro de sus bragas de encaje blanco y con un osito teddy en la retaguardia.
La joven y llamativa Liss, en realidad era un chico de una conservadora familia, descubriendo por su cuenta lo mucho que podía hacer con una falda, maquillaje y la actitud adecuada. De esa forma, cada que sus padres y hermana salen de la ciudad, Liss toma prestada la ropa más linda de su hermana menor y se pone a jugar por la ciudad, disfrutando mucho del misterio y emoción que rodea a su falsa identidad femenina, hasta que llega el momento de ocultarla cuando su familia conservadora regresa a la ciudad, sin tener la mínima idea de lo que hace su hijo mayor en su tiempo a solas.
Ahí iba caminando Liss, de forma tan confiada que rozaba en la arrogancia, andando con seguridad a quien sabe donde, ni ella sabía muy bien a qué sitio se dirigía pero quería salir y presumir a todo el mundo lo bonita que estaba ese día después de haber estado escondida durante tanto tiempo.
Su rojizo cabello atado en un cola de caballo con un listón blanco, un top hermoso color rosado con listones rojos y por debajo una blusa blanca delgada que no dejaba mucha de su blanca piel a la vista de las personas. En la cintura comenzaba una falda de cuadrícula roja con negro y unas medias hasta los muslos con unas zapatillas rosas deportivas. Su lindo e infantil aspecto junto a su llamativa personalidad sin dudar la ayudaban a destacar entre la multitud sin importar en qué lugar estuviera. Ella básicamente se estaba volviendo bastante popular por esas razones y que era raro verla por la ciudad, de repente aparecía por días u horas, armaba un buen espectáculo y desaparecía por un tiempo indefinido hasta volver a aparecer, su presencia se convirtió en una especie de buen augurio relacionado con la diversión encabezada por aquella alegre jovencita.
Si Liss pudiera le encantaría estar todos los días pasándola en grande con las personas que se encuentre en la ciudad, sin embargo sus repentinas desapariciones o tiempos de inactividad es porque sus padres y hermana están en la ciudad, lo que haría de su día uno muy problemático al encontrarla de esa manera haciendo un alboroto.
El viento soplo sin previo aviso e interrumpió sus pensamientos, sorprendiendo un poco a Liss quien volteo a los alrededores para ver si estaba o no sola. Nadie más que ella parecía estar usando la misma ruta, así que lejos de sostener su falda, la chica levantó sus brazos sin preocuparse, dejando que su ropa se moviera por el aire y dejará al descubierto su pequeño secreto atrapado dentro de sus bragas de encaje blanco y con un osito teddy en la retaguardia.
La joven y llamativa Liss, en realidad era un chico de una conservadora familia, descubriendo por su cuenta lo mucho que podía hacer con una falda, maquillaje y la actitud adecuada. De esa forma, cada que sus padres y hermana salen de la ciudad, Liss toma prestada la ropa más linda de su hermana menor y se pone a jugar por la ciudad, disfrutando mucho del misterio y emoción que rodea a su falsa identidad femenina, hasta que llega el momento de ocultarla cuando su familia conservadora regresa a la ciudad, sin tener la mínima idea de lo que hace su hijo mayor en su tiempo a solas.
-Que genial es sentir la brisa recorrer todo mi cuerpo, me encantaría posar y tomarme fotos como modelo todo el tiempo con la ayuda del viento para nuevos ángulos usando un montón de ropa linda, pero es imposible que pueda hacerlo fuera de casa, sería muy problemático para mi reputación...-
Al pensar en esa pequeña aventura que le podría dar alegría y satisfacción, de inmediato le siguió un pensamiento de decepción, puesto que eso y muchas cosas más no podrías hacerlas fácilmente ni dentro ni fuera de su hogar.
Si era descuidada o demasiado reveladora fuera de su hogar, Liss corría el riesgo de ser descubierta, y que las personas descubran que más allá de ser una hermosa chica que sale cada tanto por la ciudad, es un chico afeminado vestido de mujer. Por si la verguenza de que su secreto sea descubierto fuera poca cosa, se ponía mucho peor al pensar que de alguna manera alguien lo reconociera, y por ende les contará a su familia el secreto de que su primer hijo, se vestía como una niña cuando ellos estaban lejos de casa. Con lo cerrada y conservadora que era toda su familia, el desastre estaba servido si se enteraban de su secreto, por lo que quería protegerlo a toda costa para evitar sus muchos castigos que vendrían en consecuencia de vestirse como una mujer. Por esa misma razón, no podía estar mucho tiempo en casa con la ropa de su hermana, pues la idea de que llegarán por sorpresa y lo atraparan con las manos en la masa hacía todo mucho peor.
-Supongo que podría rentar algún lugar para tomarme fotos o algo por el estilo, quizás con un ventilador y algunas luces podría hacer maravillas. Tendré que planearlo muy bien para la próxima ocasión. Por ahora, ¿Qué es lo que haré el resto del día?-
Se preguntaba en un tono juguetón "la chica" que acomodaba su falda para que su secreto pasará desapercibido.
-Hay un nuevo bar cerca que podría visitar, también podría ir al centro comercial aunque no pueda comprarme nada bonito... y ese karaoke donde ya me conocen tampoco está mal, ¡No hay opción! Tendré que visitar todos esos sitios antes de que acabe el día-
Riéndose por sus propios planes, Liss ya tenía decidió que es lo que haría en todo su día, tenía que aprovecharlo bien pues mañana a primera hora llegaba su familia y Liss no tendría otra aparición pública hasta dentro de varios meses que pudiera estar sola de nuevo, lo cual le daba un motivo más para sacar el máximo a su "última visita" a la ciudad en un buen tiempo.
Riéndose por sus propios planes, Liss ya tenía decidió que es lo que haría en todo su día, tenía que aprovecharlo bien pues mañana a primera hora llegaba su familia y Liss no tendría otra aparición pública hasta dentro de varios meses que pudiera estar sola de nuevo, lo cual le daba un motivo más para sacar el máximo a su "última visita" a la ciudad en un buen tiempo.
Me encanto la historia más historias así por favor
ResponderBorrarGracias, Marco.
Borrar-Nero.
Me encantan las historias de femboys ojalá subas más así
ResponderBorrarGracias, pero como ya había comentado, no es el tema principal en este blog, así que no las verá tan seguido como creo yo que le gustaría.
Borrar-Nero.